Hay una escena de El silencio de los Inocentes que jamás pasará desapercibida, y esa es justamente cuando casi al final, sale Bufallo Bill, el digamos, malo de la historia, maquillándose con un tatuaje que dice “Amor”, un pezón perforado, y otro tatuaje de la punta de una navaja ensangrentada, con una especie de kimono largo de colores llamativos y una peluca moviéndose al ritmo de “Goodbye Horses”, de Q Lazzarus. Esta canción de 1988 escrita y producida por William Garvey, obtuvo una gran popularidad gracias a dicha cinta de 1991.
El contexto según explicado por el propio William Garvey, que murió en 2009, fue que esta canción era “sobre la trascendencia de aquellos que ven el mundo solo como algo terrenal y finito. Los caballos representan los cinco sentidos de la filosofía hindú y la habilidad de vivir a la altura de la percepción más allá de las limitantes físicas y también, permite ver más allá de la perspectiva terrenal”.
La historia, básicamente se resume a que en los 80, mientras viajaba en un taxi conducido por Q Lazzarus, cuyo nombre verdadero es Diana, el director de cine Jonathan Demme, escuchó el demo que sonaba en el taxi. De ahí él le preguntó que quién era y qué era lo que estaba escuchando. Ella le respondió que se trataba de su canción, así que él la llevó a Hollywood donde, con todo y su apoyo, las compañías discográficas se negaron a contratarla porque creían que no podía ser comercializada. Sin embargo, Jonathan siguió apoyándola al punto de incluir otro track llamado “Candle Goes Away” para su filme de 1986, Something Wild, “Goodbye Horses” en Married to The Mob en 1988 y en The Silence of the Lambs en 1991, y pedirle que hiciera una reversión de “Heaven”, de Talking Heads, para su película de 1993, Philadelphia, donde incluso Diana tuvo una breve aparición.
No obstante han pasado 30 años desde el lanzamiento de “Goodbye Horses”, de la colaboración de esta cantante afroamericana con Jonathan Demme, y desde entonces ese one hit wonder se quedó únicamente en eso, en un éxito y en una canción de culto pero no más.
En abril Dazed Digital publicó un artículo de investigación cuyo contexto decía que algunos aseguraban que se había vuelto una adicta, que estuvo involucrada en una relación tóxica y que incluso había muerto. Pero de acuerdo a sus hallazgos, dijeron que Diana podría tener entre 52 y 53 años y además recopiló varios testimonios de personas allegadas a ella en las que contaban cómo es que era en aquel entonces. Todo se había quedado ahí, en un texto simple pero en los últimos días, la escritora y músico Kelsey Zimmerman dio a conocer un poco más del paradero de Q Lazzarus.
El año pasado Kelsey Zimmerman quería hacer un cover a “Goodbye Horses” y tuiteó: “Tiempo de hacer mi googleo mensual para saber si alguien ha sabido algo de Q Lazzarus o no”. Luego, días atrás nuevamente tuiteó sobre eso y de repente alguien le respondió diciendo que era Q Lazzarus. Al menos así lo explica Kelsey misma en su cuenta de Facebook, donde escribió lo siguiente:
Ayer de la nada, una mujer que aseguraba ser Q Lazzarus me respondió en Twitter diciendo que estaba viva. Pensé que era una broma, así que simplemente respondí: ‘Tú eres mi cuenta favorita’, y ya no pensé más en el asunto. Pero esta mañana, esa cuenta tuiteó: ‘¿Alguna pregunta?’. A lo cual respondí: ‘Todo un correo de hecho’. Y luego recibí un mensaje directo diciendo lo siguiente:
‘Hola, lamento molestarte. Solo quería que la gente supiera que sigo viva, no tengo interés en seguir cantando. Soy chofer de autobús en Staten Island (lo he sido por AÑOS), veo cientos de pasajeros todos los días así que no me estoy escondiendo (¡o muerta!), le he dado a Thomas Gordon (de Dazed) mi número de teléfono y mi dirección solo para confirmar que soy ‘real’, lamento si esto es un aburrido final a la historia, voy a eliminar mi cuenta de Twitter tan pronto como lo encuentre extraño, por favor toma nota de este mensaje en caso de que alguien más esté interesado. GRACIAS’.
La investigación de Dazed salió en abril de este año, sin embargo, tal parece que no le dieron seguimiento a la vida de Q Lazzarus, por lo que ella, al leer dicha pieza y luego indagar en Twitter, se dio cuenta de que alguien famoso, en este caso Kelsey, estaba interesado en su vida y decidió responderle con un mensaje directo. Posteriormente eliminó su cuenta pero los tuits de Kelsey quedaron ahí como referencia de que eso realmente había sucedido. Tanto sus tuits como su post en Facebook explicando toda la situación.
De ser cierto de que Q Lazzarus fue la que le mandó ese mensaje, entonces la parte de que se convirtió en chofer de autobús tiene sentido considerando de que anteriormente había sido chofer de taxi, donde conoció al cineasta que la lanzaría a la “fama”.
Por otra parte cuando Kelsey recibió el mensaje, vio que el nombre del usuario era Diane Luckey, se puso a indagar en Google y resultó que en una página web judía, encontró que hay una mujer con el mismo nombre que levantó una demanda contra una compañía de autobuses de Staten Island en 2015 por no tener a una mujer como chofer.
“Compartiré las capturas de pantalla de la conversación, pero estoy básicamente 100 por ciento segura que la persona que me contactó en efecto es Q Lazzarus, y me está volando la cabeza. ‘Goodbye Horses’ continúa siendo una de mis canciones favoritas de todos los tiempos y si algo de esto es cierto, estoy muy feliz de saber que alguien a quien admiro está viviendo una vida feliz, simple y lejos de la industria musical porque así lo quiso. La canción te atrapa y es icónica, es el final perfecto a todos los horribles rumores que decían que ella había muerto en Londres en los 90 o que era una adicta a las drogas y que se había inmiscuido con alguien que la llevó a un mal matrimonio o alguna otra de las tantas conspiraciones que he escuchado”, escribió Kelsey, para después responder los comentarios de los usuarios con más pruebas sobre esa versión y la existencia de Diane.