Hace unos meses descubrimos que las personas que asisten a conciertos de metal son las que más consumen drogas. Pero lo que nadie se esperaba —y mucho menos se imaginaba— es que una banda podía ensuciar tanto su ropa al punto de hacerla “desagradable”. Al menos eso es lo que ha revelado Hans-Jürgen Topf, fundador de la famosa lavandería Rock ’n’ Roll en Alemania que se encarga de lavar la ropa de artistas que se encuentran de tour alrededor del mundo. Uno de ellos es Slipknot, y en las propias palabras de Topf, su ropa representa un gran reto.
De acuerdo a un artículo sobre Topf publicado en el New York Times, él ha desarrollado una reputación por tener la ropa extremadamente limpia y con entregas rápidas, sin embargo, cuando se trata de Slipknot resulta complicado. “Cuando (la banda) está en tour, Topf se la pasa casi todos los días lavando las prendas de los integrantes, que usualmente tienen que secarse el aire”, se lee en el artículo.
Pero eso no es todo, pues de acuerdo a las palabras del propio Hans-Jürgen, las de Slipknot son las prendas más sucias que ha lavado jamás, ya que en su mayoría están manchadas de cerveza, crema, sangre falsa y luego son dejadas en bolsas para basura por tres días, lo cual hace que el olor sea todavía más inaguantable.
“Las manchas más comunes de la ropa de los artistas son sudor y polvo de aluminio del equipo que hay en el escenario”, explica Topf, pero al parecer esto no es comparado en absoluto con lo que tiene que pasar con Slipknot, banda que en octubre del año pasado lanzó su primera canción en cuatro años y que regresará a los escenarios a finales de este 2019, esto luego de la salida de su nuevo material de estudio.
En cuanto a la lavandería Rock ’n’ Roll, fue fundada en Alemania en los 80, y durante todos estos años se ha encargado de limpiar prendas de personalidades como Beyoncé, U2, Elton John, Madonna, David Hasselhoff, Pink y más. Además, otra cosa que Hans-Jürgen menciona en el artículo, es que el negocio de las giras, al menos para los artistas como los antes mencionados, ahora es más profesional pues, anteriormente él solía encontrar drogas entre la ropa, y ahora “halla bolsas de té”. Si quieres conocer más anécdotas o leer el artículo completo del New York Times, da click aquí.