5 discos clave que marcaron la historia del trip hop

Definitivamente, uno de los géneros más atractivos que surgieron en la década de los 90 fue, sin duda, el trip hop. Tomando como inspiración una amplia gama de ritmos, en particular el hip-hop y la música electrónica, varios artistas (en su mayoría británicos) comenzaron a experimentar con distintas técnicas de producción innovadoras para crear sonidos nuevos y frescos. 

A partir de ahí, surgió una escena musical y artística muy interesante, específicamente en la zona de Bristol, Reino Unido. Con grupos como Massive Attack y Portishead, que se convirtieron en abanderados de este movimiento y con el paso del tiempo en fuente de inspiración para bandas y artistas contemporáneos que nos encantan.

Repasemos algunos de los discos más importantes para el trip hop

Sin embargo, el trip hop cayó un poco a mediados de los 90 contra otros géneros populares durante la década, como el britpop y el indie rock. A pesar de que muchos de sus exponentes siguieron haciendo discos y rolas increíbles, la gran mayoría de esos trabajos, injustamente, pasaron un tanto desapercibidos a pesar de la enorme influencia que dejaron para el futuro.

Es por eso que para reconocer el legado de esos pioneros, por acá repasaremos algunos de los discos más importantes del trip hop que definitivamente, pusieron las bases de este género y marcaron por completo la historia de la música.

Massive Attack – Blue Lines (1991)

Comenzamos esta lista con un verdadero clásico. Sin duda, Massive Attack es uno de los grupos de trip-hop más importantes de los años 90 y con su álbum debut, Blue Lines, lanzado en 1991, se convirtieron en uno de los primeros proyectos que exploraron e incursionaron de lleno con muchos de los elementos del género.

El álbum –que combinaba el hip-hop estadounidense con influencias como el funk, el soul, el dance y el dub– fue un respiro de aire fresco al comienzo de una nueva década y sigue sonando igual de innovador a pesar de los años.  Entre las rolas más destacadas se encuentran “Unfinished Sympathy” y “Safe From Harm”, aunque es difícil encontrar un momento débil en el disco. 

A pesar de que siete años más tarde, Massive Attack estrenó el que muchos consideran que es su obra maestra y uno de los trabajos más importantes de su carrera, Mezzanine, no hubieran podido llegar al siguiente nivel de no ser por el primer salto que dieron en Blue Lines. Y si le quieren entrar al trip hop, este definitivamente es uno de los discos que deben escuchar.

Portishead – Dummy (1994)

De plano no podemos entender el trip hop sin el innovador álbum debut de Portishead, Dummy. Este disco es la entrada perfecta al género, gracias a su variedad de rolas envolventes, que a través de melodías nos llevan por paisajes misteriosos y cinematográficos, así como cortes melancólicos cargados de sexualidad. La icónica voz de Beth Gibbons es simplemente mágica y se mezcla muy bien con la instrumentación cuidadosamente creada, que se basa en una mezcla de hip-hop, música clásica y el rock alternativo.

Para lograr el sonido vintage del disco, la banda grabó directamente en vinilo antes de samplear y editar su propia música, una técnica que nadie había usado antes. En Dummy, Gibbons, Geoff Barrow y Adrien Utley crearon una atmósfera sobrenatural mediante su épico uso de texturas, sobreponiendo varios samples y permitiendo que el sonido del vinilo rechinara libremente a través de las canciones.

Y sí, sabemos que el disco homónimo de Portishead (el cual lanzaron tres años después) es una maravilla casi al mismo nivel de su álbum debut, pero lo que consiguió el grupo con Dummy fue una experiencia musical como ninguna otra. Y de plano, más allá del trip hop, este es uno de esos álbumes que tienes que escuchar si eres fan de la música.

Tricky – Maxinquaye (1995)

A pesar de ser uno de los miembros fundadores de Massive Attack, Tricky se sentía insatisfecho con su papel en el grupo. Esto lo motivó a crear música en solitario y el resultado fue Maxinquaye de 1995, disco cuyo titulo viene del nombre del músico y productor británico, en el cual principalmente la voz de Martina Topley-Bird, quien años más tarde sería reconocida como una de las voces más importantes del Reino Unido.

Musicalmente hablando, para este álbum, Tricky se inspiró en el hip-hop, el dub, el rock alternativo, el techno, el ambient y más para crear una increíble colección de rolas que sigue siendo uno de los álbumes más definitivos del trip hop. Desde la potente reinvención de Public Enemy con “Black Steel”, hasta la suave y mágica “Hell Is Round the Corner” (que usa un sample similar a “Glory Box” de Portishead). Este disco de plano es imprescindible para este género.

DJ Shadow – Endtroducing… (1996)

Aunque la gran mayoría de exponentes del trip hop son británicos, en Estados Unidos también le entraron a este género. Y el claro ejemplo de esto es Endtroducing…, el álbum debut de DJ Shadow que sorprendió a muchos por el impresionante trabajo de producción que hay detrás de este disco, ya que cada rola está hecha casi en su totalidad por samples.

El disco incluye pedazos de canciones de artistas como Björk, Tangerine Dream, Metallica y más, combinados con beats con fallas y sonidos de scratch de viniles para unir todo. “Building Steam with a Grain of Salt”, “Mutual Slump” y “Organ Donor” son solo algunas de las joyitas que podemos escuchar en el primer material discográfico de DJ Shadow, el cual significó un triunfo para el sampling en la industria musical e inspiró a muchos músicos del futuro.

Smoke City – Flying Away (1997)

Cerramos esta lista de discos clave en la historia del trip hop con un grupo que quizá no duró mucho tiempo, pero fueron muy influyentes. Hablamos de Smoke City, banda formada en 1996 integrada por Mark Brown, Chris Franck y la cantante brasileña/inglesa Nina Miranda, quienes un año después de su nacimiento lanzaron su impresionante álbum debut, Flying Away.

En este disco, transmiten una atmósfera sensual, que nos transporta a un ambiente tropical relajado. Esto gracias a que mezclaron ritmos como la samba, música caribeña, jazz, hip-hop y efectos evocadores con el trip hop, dando como resultado un álbum cuyos sonidos genuinamente nos hacen sentir como que estamos en la playa nadando tranquilamente.

Dentro de Flying Away vienen algunos himnos del género, como “Underwater Love”, “Devil Mood” y “With You”, los cuales están algo infravalorados. Puede que Smoke City se haya separado en 2002 y no se ven posibilidades de que puedan regresar, pero no podemos negar que con este álbum hicieron historia al crear una de las joyas del trip hop.