La historia de Pink Floyd se puede dividir en dos partes, antes y después de Syd Barrett. Después de su salida del grupo en 1967, David Gilmour tomó el rol de guitarrista principal, y gracias a él evolucionó el sonido de la banda, pero el legado que dejó Barrett vive en las aportaciones que dejó en sus primeros dos discos. Sin embargo, la cosa no se quedó ahí.
En 1975 la banda editó Wish You Were Here, uno de los álbumes más importantes de la nueva etapa y donde homenajeaban al ex miembro fundador. Pero ahora en estos tiempos de cuarentena y después de compartirnos el épico show que dio hace algunos cuando volvió a Pompeya, el mismísimo Gilmour decidió recordar a Syd de una manera más personal.
Como recordarán, David Gilmour junto a su esposa Polly Samson y el resto de su familia transmiten cada semana un programa llamado Von Trapped Family, donde todos se reúnen para cantar un montón de canciones, leer poesía, contestar las preguntas que hacen los fans y hasta echarse una que otra copa de vino, todo en un ambiente un tanto bohemio con mesas decoradas con velas.
En medio de todo lo que pasa con los Gilmour, David aprovechó su momento para tocar con la guitarra acústica dos rolas, las cuales fueron de las últimas que compuso Syd Barrett, “Octopus” y “Dominoes”, con ese feeling bluesero que tanto lo caracteriza y respetando por completo lo que hizo como solista el miembro fundador de Pink Floyd.
Además de escucharlo tocar esas melodías que salieron de la cabeza de Barrett, Gilmour también contó algunas anécdotas del tiempo que pasó trabajando con él, pues David tocó la batería en “Dominoes” en el estudio dos de Abbey Road, algo que sin duda todos los fans de la legendaria banda amarán escuchar.
Por si esto fuera poco, el guitarrista dijo que antes de que la pandemia del coronavirus atacara al mundo, se le acercaron para que editara y corrigiera unas notas que formarán parte de un nuevo libro sobre Syd Barret, el cual se centrará en particular en las letras que el músico compuso en su fugaz carrera.
Checa a continuación a David Gilmour rindiéndole al gran Syd Barrett tocando algunas de las rolas de su carrera como solista:
