Juan Gabriel fue un artista cuyo recuerdo pasó a la inmortalidad. Fueron esa energía sobre el escenario, esa pasión a la hora de interpretar cada una de sus canciones, ese carisma, esa forma de moverse y sobre todo, el sentimiento que impregnaba en cada uno de sus temas que en su mayoría fueron compuestos por él.
Su carrera no fue fácil. Todo lo contrario. Pero fue Lola Beltrán la encargada de darle una oportunidad, de introducirlo al mundo artístico para que de ahí se entrara a un camino sin retorno. Para que así como Lola, él también hablara de la felicidad de la vida, de lo bueno y lo malo que hay en ella pero sobre todo, del amor. El amor eterno, el amor no correspondido y, ¿por qué no?, lo bonito que puede ser el amor.
Otra cosa que también es digna de agradecerle, es que además de ser parte de la cultura popular mexicana desde los años 70, conforme pasaron los años y llegaron nuevas generaciones musicales, éstas decidieron rendirle tributo al Divo de Juárez de una manera muy peculiar. Cómo olvidar el cover de Jaguares a “Te Lo Pido Por Favor”, “El Noa Noa” de Vicentico o si te gusta algo más popular, entonces Los Kumbia Kings y su “No Tengo Dinero”. Un sinfín de opiniones y variedad para todos aquellos que les guste la música alternativa y al mismo tiempo recordar a Juanga.
Ahora bien, además de esto, están aquellas canciones que él mismo compuso, pero que otros artistas las cantaron al punto de apropiarse de ellas. Y con esto no nos referimos al ámbito legal, sino al nivel de popularidad que ni el Juan Gabriel mismo pudo alcanzar. Con esto no queremos demeritar su carrera sino todo lo contrario, rendirle un tributo a él como compositor, como cantante, como un showman mexicano cuya vida y muerte trascendió a través de países, continentes, que abarcó todo un mundo.