LYKKE LI – I NEVER LEARN
DURACIÓN: 33 minutos
FECHA DE LANZAMIENTO: 2 de mayo, 2014
PRODUCTOR: Lykke Li, Björn Yttling & Greg Kurstin
@DJ ZAPO: I Never Learn es el disco de una vieja ardida que no puede superar el que su wey la haya dejado.
SHY: Maravilloso análisis. En realidad, Lykke Li nos ha dejado con un magnífico testimonio–
ZAPO: No he terminado.
SHY: Claro que si.
ZAPO: ¿…?
SHY: Disculpa, hay algo mal con el sonido. Si no te escucho, es imposible para mi transcribir tus diálogos.
ZAPO: ¡…!
@SHY: Lo sentimos. Por razones técnicas no podremos compartir la reseña de DJ Zapo del nuevo álbum de Lykke Li, titulado I Never Learn >ajem< un magnifico testimonio de las recientes experiencias amorosas de la artista sueca. Con este disco, Lykke Li cierra la trilogía que inició hace poco más de cinco años con Youth Novels, seguida por Wounded Rhymes. Pero no esperes encontrar algún éxito para la radio como “Dance, Dance, Dance” o “I Follow Rivers”. En lugar de eso, Lykke Li tomó la ruta del álbum confesional que nos conmueve, no por alguna melodía pegajosa, sino por la honestidad de sus letras.
Decía Henry Miller en Trópico de Cáncer que para ser un artista, no basta con estar sólo, sino vivir en la soledad. Bajo este concepto, no debe sorprendernos que Lykke Li nos de el mejor álbum de su todavía breve trayectoria artística. Las canciones de I Never Learn tomaron forma tras la ruptura de una relación, y nos conmueve su dolor porque Lykke logra trasladar con maravillosa eficacia sus emociones al papel. Sólo por mencionar un ejemplo entre tantos, en “Just Like a Dream”, ella canta Before I replace you / Lie with me one last time. DJ Zapo tenía algo de razón cuando dijo que ella todavía no puede superar la ruptura de una relación que la dejó devastada. El detalle que omitió en su excusa de reseña es que el talento del artista reside en su habilidad de capturar esa emoción y transformarla en una expresión que la transmita a través de un medio artístico.
Lykke Li hizo bien en reclutar a Björn Yttling (de Peter Bjorn and John) para darle forma a su visión. Nos quedamos con un álbum conciso y bien armado, con un sonido que toma muchos elementos prestados de las power ballads ochenteras, aunque deja fuera los clichés de sus versos (Lykke prefiere apoyarse en sus propias experiencias). Eso sí, vuelve a estar presente la influencia de Kate Bush en la creación de atmósferas que expanden el sonido como en la genial “No Rest for the Wicked” en la que retumban las percusiones como si estuvieran en un hangar abandonado. Con I Never Learn, Lykke Li no aspiraba a forjar en piedra una reputación como estrella de pop o linda chica indie, sino anhelaba la credibilidad de una autora y compositora digna de respeto. Y claro, hay que mostrar sin pena el alma para lograr ese objetivo. Más fácil es caminar por la calle desnudo.
1. I Never Learn ****
2. No Rest For the Wicked *****
3. Just Like a Dream ****
4. Silverline ***
5. Gunshot ****
6. Love Me Like I’m Not Made of Stone *****
7. Never Gonna Love Again ****
8. Heart of Steel ****
9. Sleeping Alone ***