Fotos/Reseña: Nacho DelaGarza
No cabe duda que hay festivales donde las excentricidades, las luminarias y los influencers son el plato fuerte del evento, pero el festival texano Austin City Limits es de los pocos que ha sabido mantener la música como lo más importante.
Son tres días intensos que se disfrutan con una temperatura cerca de los 40º C, pero vale la pena andar corriendo de un escenario a otro para poder traerles imágenes y un poco de la experiencia que se vive en el ACL.
Uno de los primeros actos que pudimos disfrutar fue el de los rockeros Black Pistol Fire, grupo canadiense pero de base en Austin formado solo por Kevin en la guitarra/voz y Eric en la batería que nos hace recordar un poco de los inicios más crudos de los Black Keys, pero con más energía en el escenario. Por si no los conocen vale mucho la pena escucharlos.
En otro escenario el ensamble colombiano de Monsieur Periné traía ese sabor latino al festival. Liderados por la increíble Catalina García, la banda puso a propios y extraños a mover el cuerpo con su mezcla de pop/cumbia/danzón/salsa.
Después tocaba el turno a la neoyorquina Mikaela Straus conocida como King Princess. A sus 21 años y siendo relativamente nueva en la escena musical, la multi-instrumentista supo dar un increíble concierto donde miles de seguidores ya la esperaban.
Sumida un poco en la controversia por haberse declarado abiertamente como lesbiana y preocupados porque le pudiera afectar en su lanzamiento, esto no ha importado ni poquito, y su público espera con ansias su primer disco ‘Cheap Queen’ que saldrá este 25 de octubre, del cual pudimos escuchar “Trust Nobody” y “You destroyed My Heart”. Sin faltar “1950”, canción que la llevó a oídos de todo mundo. No cabe duda que vienen cosas muy buenas para ella.
The Raconteurs era otro acto que definitivamente la gente esperaba. Jack White y compañía dieron un conciertazo lleno de buen rock. Jack, portando la camiseta de “Hi, How Are You” en honor al recién fallecido Daniel Johnston. Tocaron “Level”, “Now That You’re Gone”, “Don’t Bother Me” y sin faltar “Sunday Driver” que puso a todos a cantar.
Del otro lado del campo, estaban como headliners los australianos de Tame Impala que con un Kevin Parker bastante agradecido no dejaba de agradecer por la cantidad de público que los habían ido a ver a pesar que del otro lado se presentaba Guns N’ Roses. “¿En serio? Prefirieron vernos a nosotros?” preguntaba Kevin para dar comienzo con “Let It Happen” seguida por “Borderline” y “The Moment” entre muchas más. Es todo un agasajo musical y visual verlos en vivo.
Del otro lado, Axl Rose, acompañado de Slash, Duff McKagan y el resto de los miembros de Guns N’ Roses salían a escena entre los gritos de miles de asistentes. “It’s So Easy”, “Welcome To The Jungle”, “Live And Let Die” fueron parte de las primeras canciones que el grupo tocaría, pero la locura fue cuando tocó el turno a “Sweet Child O’ Mine”, “November Rain” y “Knockin’ on Heaven’s Door”. Axl y compañía se despidieron… pero en menos de cinco minutos regresaron para rematar con “Don’t Cry” y “Paradise City”. Nada mal para terminar el primer día.
Sábado, comenzamos con nuestra querida Natalia Lafourcade que al compás del Son De la Negra salía al escenario para continuar con “Mi Tierra Veracruzana” y “Lo Que Construimos” entre otras más. No cabe duda que el talento y carisma de Natalia se transmite y su público lo recibe con mucho cariño.
Otra fémina que se presentaba ese día del otro lado del campo era Kali Uchis. Con un vestido super ajustado que no dejaba mucho a la imaginación salió bailando lentamente con una intro y “Loner” seguida por “Dead To Me”. Aprovechó para saludar a la comunidad latina e interpretar “Pobre Diabla”, cover de Don Omar. También cantó cover de “Beautiful” de Pharrell Williams y “Creep” de Radiohead.
Siguiendo con la presencia de las mujeres en el festival, la californiana Billie Eilish que con tan solo 17 años es toda una sensación salía al escenario frente a miles de fans que la esperaban con ansias mientras los tonos de “bad guy” comenzaban a sonar ante la euforia de todos. Seguida por “my strange addiction” y “you should see me in a crown” entre otras la adolescente dio un concierto a la altura de los grandes.
Pero faltaba el plato fuerte para esa noche, The Cure. La noche había caído cuando Robert Smith, Simon Gallup, Jason Cooper, Roger O’Donell y Reeves Gabrels pisaban el escenario ante un público que los había esperado por años. Las notas de “Plainsong” comenzaron a sonar mientras Smith caminaba de un lado al otro y se acercaba al frente del escenario fijando su mirada a la gente con esa sonrisa chueca entre siniestra e inocente mal-pintada de lipstick rojo.
Le siguieron canciones como “Pictures Of You”, “High”, “A Night Like This” y “Lovesong” que puso a cantar al unísono a todos los asistentes. Aún no siendo una persona muy expresiva en el escenario, Smith aprovechaba y seguido sonreía a sus fans. “Last Dance”, “Fascination Street” y “Push” nos llevaban entre sus múltiples álbumes. La locura siguió mientras Smith tocaba en la guitarra acústica para comenzar con “Friday, I’m In Love”. Un par de canciones mas y la noche llegaba a su climax cerrando con broche de oro, “Boy’s Don’t Cry”.
El domingo comenzó para nosotros lleno de flamenco y la voz increíble de la barcelonesa Rosalía. Comenzando con “Pienso en tu mirá” y “Como ali” Rosalía salió como las grandes pisando el escenario con seis bailarinas que se movían sincronizadas junto con ella. Fue realmente un buen concierto con canciones llenas de ese sentimiento español en su interpretación. Sobra decir que con “Yo X Ti, Tu X MI” y “Con altura” la gente enloqueció.
Definitivamente a quién le quedó chico el escenario fue a Lizzo. El público que la quería ver era impresionante y hacía imposible moverse. Entrando con “Cuz I Love You” la joven cautivó a propios y extraños que quizá nunca la habían escuchado. La pregunta de muchos asistentes era porqué no la pusieron en el escenario principal… Y esto se debió simplemente al hecho de que cuando Lizzo fue incluida en el lineup de ACL en abril su fama no era tal como la que alcanzó cuando el éxito de su canción “Truth Hurst” se fue por los cielos. Ya no hubo tiempo de cambiarla a otro escenario.
Aprovechó cada momento que tuvo para animar a su público a seguir sus sueños: “Si alguien como yo, grande y negra la pudo hacer, ¡cualquiera de ustedes la puede hacer! Quiero que se vayan de aquí con algo más de un buen show… váyanse queriendo ser ustedes mismos, sintiéndose seguros y amados, libres”.
Más tarde le tocaba el turno a Cardi B en el escenario principal. Con un retraso de casi 30 minutos la joven del Bronx descendiente de padres dominicanos salió al escenario con todo un show de bailarinas e imágenes en pantallas increíbles y vistiendo un outfit que no dejaba mucho a la imaginación. Canciones como “Lick”, “Twerk” donde obviamente puso en practica sus movimientos de twerk, “Wish Wish” y “I Like It” que puso a cantar y bailar a todo mundo fueron parte de su repertorio. Terminó su presentación con “Bodak Yellow” canción que la llevó a la fama.
Ya para dar por concluido el festival, los británicos de Mumford & Sons salían a hacer lo suyo. Un concierto lleno de calidad y buenas canciones es lo que Marcus Mumford y compañía saben hacer mejor. Entrando con todo, “Guiding Light”, “Little Lion Man” y “Babel” fueron sus primeras canciones para conectar con sus fans.
Un pequeño escenario en el centro del público también fue utilizado para ejecutar unas cuantas canciones en versión unplugged como “Forever” y “Awake My Soul”. Y ya para terminar tocaba el turno para su mayor éxito “I Will Wait” y “Delta”, título de su más reciente disco.
Galería de imágenes de Austin City Limits:
