Durante los 90s y la explosión del llamado ‘rock alternativo’, hubo muchas bandas que consiguieron llevar lo que se hacía en la independencia hacia el mainstream con exitosos resultados. Bandas como Nirvana, Pearl Jam, Soundgarden, entre otras lograron carreras muy exitosas con discos que actualmente son considerados clásicos.
Sin embargo, por cada banda ‘alternativa’ que se hacía de un nombre en la corriente principal, había muchas que se quedaron perdidas en el tiempo, sumergidas en lo profundo del underground y cuya existencia era un secreto bien guardado por los pocos que los escuchaban e iban a sus shows. Esas bandas que eran tuyas y que no querías que jamás fueran populares.
Y de todas las bandas que pasaron por debajo del radar durante la década de los 90 (que se pueden dar una gran cantidad de excelentes ejemplos), Unwound se erigía como una de las más interesantes y, probablemente, la mejor de su tiempo (al menos una de las mejores, si piensan que es una afirmación exagerada; ciertamente es debatible).
Unwound era una banda de Post-Hardcore y Noise-Rock surgida de la increíble escena independiente de Olympia en el estado de Washington, Estados Unidos
Formada en 1991, la banda estaba conformada por Justin Trosper (voz, guitarra y composición de las letras), Vern Rumsey (bajo) y Brandt Sandeno (batería) quienes habían formado parte de una banda llamada Giant Henry. En 1992, Sandeno dejó la banda y fue reemplazado por la fenomenal Sara Lund.
Durante casi toda su carrera lanzaron su música en la influyente disquera independiente local, Kill Rock Stars, fuerte impulsora del movimiento Riot Grrrl con bandas como Bikini Kill y Bratmobile y también hogar de artistas como Elliott Smith, Deerhoof, Xiu Xiu y más.
Su estilo combinaba una gran variedad de influencias que incluían a bandas como Sonic Youth, Melvins, Fugazi, Minutemen, Hüsker Dü, Black Flag, Can, Ornette Coleman, entre otras.
La banda comenzó con un sonido más crudo y proveniente del punk aunque agregando desarrollos instrumentales largos con elementos extraídos del post-punk. Poco a poco y con cada disco que lanzaron (siete LPs oficiales) empezaron a incorporar influencias de dub, free jazz y hasta post-rock.
Su música en general está llena de mucha distorsión y feedback, aunque también podían hacer tracks con un mood mucho más intimo, todo lo que era base para las muchas veces deprimentes, volátiles y/o enigmáticas letras de Justin Trosper. Y esa es una de las grandes cosas sobre Unwound, puedes escuchar la evolución de su sonido con cada disco, ninguno es igual al anterior.
La banda se encontraba constantemente de gira y tocaron al lado de bandas como Sonic Youth, Mogwai, Fugazi, Blonde Redhead, Polvo, Deerhoof entre otras bandas del circuito independiente estadounidense.
Al igual que otros de sus contemporáneos, la banda tenía una política de hacer shows para todas las edades, es decir, no vendían alcohol para que fans de todas las edades pudieran entrar a sus conciertos sin problemas.
Y, por cierto, en vivo eran fenomenales, muchas veces extendiendo sus tracks con diferentes dinámicas musicales y siempre mostrando mucha energía en sus interpretaciones.
La banda sin embargo, jamás consiguió lograr entrar al mainstream. Su disco más exitoso fue Repetition de 1996 que logró vender algunas decenas de miles de copias, en buena parte por su sencillo ‘Corpse Pose’, muy probablemente, su track más amigable para la radio.
Para finales de la década de los 90 y principios del nuevo milenio, la banda sentía que era el momento de retirarse de la escena pero no lo hicieron sin despedirse con un grandioso álbum que fue todo un salto adelante para la banda: el LP doble, Leaves Turn Inside You de 2001.
La instrumentación incluye desarrollos instrumentales propios del post-rock, arreglos de cuerdas en algunos tracks, uso del Mellotron, en un ambicioso disco que comparte muchos paralelismos con una de las obras más importantes de principios del siglo XXI: Kid A de Radiohead, ambos siendo discos que le daban la espalda a los convencionalismos del rock para abrazar algo completamente nuevo.
Sin embargo, mientras en el caso de Radiohead era una especie de nuevo comienzo para la banda de Oxford, Unwound marcaba con este álbum el fin de una de las bandas más geniales de su generación y lo hicieron con un que es increíble de principio a fin.
Unwound casi no sonaron en la radio y sus pocos videos nunca salieron en MTV pero su influencia sigue presente especialmente en las agrupaciones pequeñas e independientes que buscan nutrirse de sonidos que no están dentro de los comercial y que los llevan a otros mundos.
Sin duda, Unwound es una de las mejores bandas que existieron en los noventas, aún si su papel en la historia de la música está oculto muy por debajo del mainstream.
