Alguien debe detener a Kanye West. O en su defecto, deberíamos (todas y todos) dejar de conversar sobre lo que el rapero hace o dice. Es bien sabido que a Ye le encanta estar en medio de la controversia. Pero una cosa es que abra una escuela extraña cristiana, y otra que haga comentarios que denoten racismo y promuevan los discursos de odio.
Ahora bien. Podríamos pensar que así como los padres inscribir libremente a sus hijos en la Donda Academy (ACÁ les contamos más), igual podemos darle follow o unfollow a Kanye en sus redes sociales. Sin embargo, no es tan simple por dos razones. La primera porque la influencia que tiene Kanye es enorme (superando sólo sus cualidades como artista).
Y en segundo lugar, porque a partir de esa influencia, es que las conversaciones se potencian y disparan por cualquier cosa que haga o diga. Desde sus conflictos personales con su exesposa Kim Kardashian (la toxicidad al máximo), hasta unos recientes comentarios antisemitas que hizo que Twitter e Instagram aplicaran un “restringir” en las cuentas. Pero acá les contamos más.
¿Qué dijo Kanye sobre la comunidad judía?
Primero fue Instagram, plataforma que decidió borrar un comentario por supuestamente violar algunas de las políticas de la plataforma. Y además, restringió sus publicaciones a partir de que son constantes las violaciones que vienen de su cuenta. Instagram, en un comunicado, no dijo específicamente cuál fue el post que causó todo esto.
Fue así como Kanye se fue a su cuenta de Twitter. Por acá realizó un par de publicaciones que fueron consideradas antisemitas al decir él no podía ser antisemita porque la comunidad negra también es judía, y también dijo que “han estado jugando conmigo intentando excluir a cualquiera que se opongo a su agenda“.
A ese post, el cual ya fue eliminado, le siguió uno en donde el rapero pregunta quién inventó la cultura de la cancelación. También publicó una imagen suya junto con Mark Zuckerberg donde donde le habla directamente al dueño de Facebook para decirle que antes solían ser amigos.
Algunas celebridades han reaccionado a esta situación, particularmente a los comentarios antisemitas de Kanye West. Tal es el caso de Jamie Lee Curtis, quien dijo que “las palabras importan. Una amenaza contra la comunidad judía una vez se convirtió en genocidio. Tus palabras lastiman e incitan a la violencia. Eres padre de familia. Por favor, detente“.
En cambio, Elon Musk (quien hace unos meses intentó comprar Twitter), le dio la bienvenida Kanye West. “¡Bienvenido de vuelta a Twitter, amigo!”.
White Lives Matter
Hace una semana, en la Semana de la Moda en Paría, Kanye se armó una pasarela secreta donde invitó a algunas celebridades para que le echaran un ojo a su nueva colección. Todo iba bien hasta que Kanye, acompañado de algunas personas como su hija North, vestían una playera con un mensaje bastante ofensivo.
En la espalda se lee el lema de “White Lives Matter”, el cual se relaciona con la ideología de supremacía blanca, y que nació como respuesta a las protestas de años recientes que buscan exponer la brutalidad policiaca en los Estados Unidos en contra de las comunidades afrodescendientes con la frase “Black Lives Matter”.
Esto desató un conflicto, además, con una de las periodistas más destacadas de Vogue llamada Gabriella Karefa-Johnson. Ella dijo en sus redes sociales que “las camisetas que este hombre ha ideado, producido y presentado ante el mundo son pura violencia. No hay excusa, no hay arte”.
Kanye West respondió y se armó la trifulca digital en donde se metieron algunas celebridades como Gigi Hadid, quien defendió a Gabriella y dijo que no importaba quién fuera Kanye, la irresponsabilidad del mensaje era severa. Lo mismo sucedió con Jaden Smith, quien incluso se salió del desfile antes de que terminara.