La escena del hip hop en México se ha vuelto más diversa con el paso de los años. Aceptado por unos y odiado por otros quienes se mantienen fieles a un estilo duro y de barrio, el hip hop se ha quebrado en una gran gama de subgéneros, mismos que nacen de la mezcla de ritmos de todo el mundo, dando vida a ramas como el trap y el reggaetón, subgéneros urbanos que, les guste o no, son en parte hip hop.
¿Pero es eso malo? ¿No es el objetivo de la música unir antes que dividir masas? Para Ali Masare es así.
Productor y DJ desde hace poco más de 10 años, Ali encontró en las tornamesas su pasión y la vía para hacer que personas como Jessy Bulbo, pasaran del garage y el punk, al ritmos más bailables como el reggaetón. Porque, aunque lo nieguen, todos han pecado de moverse hasta perderle el respeto al suelo.
“Siempre he buscado esa cuestión de poder hacer cosas que a mí me gustan y llevar a los artistas a otro lado diferente de lo que ya son. Me gusta que su música puedan ir en otro sentido porque creo que la música no debe tener barreras”, cuenta Alí.
Y siendo honestos, tiene razón, pues la mezcla de géneros, es la que permite ir hacia nuevas fronteras y pintar nuevos escenarios… aunque no todos funcionarán (¿alguien se acuerda del tribal? Tal vez regrese… o no).
Quizá sea el rechazo al cambio, quizá sea sólo cuestión de gustos, pero como dice Ali, los prejuicios no deberían tener su base en la música que cada persona escucha, pues sería lo mismo que juzgar a alguien porque tiene tatuajes (¡UPS!).
“Yo lo que quiero hacerle ver a la gente es que la música no debe tener barreras porque eso es lo padre, su diversidad. Hay que quitar los prejuicios. Puedes escuchar rock y siempre lo vas a hacer, pero no tengas un prejuicio de un género que es totalmente diferente porque también tiene sus bases y contexto.
Creo que ahora hay muchos crossovers de la cumbia, el reggaetón y más ritmos diferentes y se me hace bueno. Es algo que yo aplico para mi proyecto”.
Desde que Ali Masare se inició como productor, siempre tuvo en mente volverse parte de una escena en la que pudiera colaborar y aportar para impulsar la música urbana, es decir el hip hop y todas sus vertientes.
“Cuando empecé hace más de 10 años, parte de mi pasión era impulsar la música urbana. El hip hop no debe ser sólo de un tipo, si como rapero o músico quieres hablar de tus tenis, adelante, pero si tu hip hop es más social, habrá a quien le guste escucharte también.
Hoy existe una gran gama de música, de hip hop o música urbana, algo que hace 10 años era más complicado, no veías a tantos raperos en festivales y creo que la diversidad lo ha nutrido. Este es el momento de la escena hip hop en México“.
Ahora, Ali Masare ha dejado de ser quien hace los scratches y pasó a ser intérprete de sus rolas… aunque obviamente todavía se mantiene fiel a las tornamesas.
Hoy, este nuevo artista encontró en el trap un nuevo estilo de vida en el que se desenvuelve con facilidad, esto gracias a que ya le tocó experimentar de todo en el hip hop. Las canciones de este músico se inclinan siempre hacia el amor, el desamor y sus consecuencias, algo que, según Ali, lo definen muy bien… al menos en este momento de su vida.
“El trap es un sonido que me gusta bastante y con el que me identifiqué, pero pienso que le estoy metiendo una esencia muy particular que habla de mí.
Algo que me distingue son mis composiciones. No hago freestyle, hago algo más light, algo con lo que la gente se puede identificar. También chuleo mucho a las mujeres, pero no las trato mal. “Tú Me Gustas”, por ejemplo, es una canción que chulea a una mujer, no es misógina. Creo que eso me define y es lo que quiero seguir haciendo, música que no ofenda a las mujeres”.
Si eres valiente y quieres arriesgarte para entrarle a algo nuevo, te recomendamos que desde ya, empieces a seguir a Ali Masare.