Cuando pensamos en el rock, siempre se nos viene a la mente la típica alineación de banda conformada por guitarras, bajo, batería y vocalista. Sin embargo, con el paso del tiempo, algunas de las agrupaciones más importantes de todos los tiempos empezaron a experimentar con otros instrumentos para incluirlos en sus canciones. Y sin duda, entre los más populares está el teclado.
Ya sean órganos/pianos eléctricos o de plano sintetizadores, muchos decidieron utilizarlos para darle un toque extra a sus composiciones y sin duda, en varios casos, nada hubiera sido lo mismo si no usaran estas versiones electrónicas del tradicional piano. Y si no nos creen o para que quede clara su importancia, a continuación les dejamos algunos ejemplos:
The Doors – “Riders on the Storm”
Empecemos con una de las bandas que los tíos siempre mencionan cuando hablan de rock, ni más ni menos que The Doors. En una época donde la psicodelia se estaba robando la atención de la industria musical, Jim Morrison y compañía aparecieron en el momento justo para convertirse en verdaderos estandartes de este movimiento en Estados Unidos y en una de las agrupaciones más importantes de los 60.
Sin embargo, a pesar de contar con músicos impresionantes como Robbie Krieger y John Densmore, el arma secreta de la banda fue Ray Manzarek y su enorme talento. Aquí podríamos mencionar varias rolas, pero en esta ocasión queremos resaltar “Riders on the Storm”, un temazo que sin el piano eléctrico de Manzarek –con ese legendario intro y la vibra misteriosa y juguetona que aportó–, esta rola no hubiera sido lo mismo. Una verdadera joya.
Europe – “The Final Countdown”
Durante los años 80 y principios de los 90, el glam metal/rock era la corriente musical más popular. Muchas fueron las bandas que surgieron de aquella época, los cuales siempre se mostraban con una actitud rebelde y llevando el estilo de vida rockstar que predominaba en esas décadas tan locas. Sin embargo, habían otras que estaban más enfocadas en crear buenas rolas que en loquear duro, como el caso de Europe.
A pesar de que han sacado un montón de discos desde 1983 y han lanzado varios sencillos que llegaron a lugares decentes en las listas de popularidad, nada puede superar su más grande hit: ni más ni menos que “The Final Countdown”. Y es que para ser honestos, si le quitamos los sintetizadores pegajosos que tocó Mic Michaeli y dejamos la base rítmica, lo más seguro es que jamás hubieran sonado en todo el mundo, pues es una parte icónica que la gran mayoría recuerda.
The Beatles – “Strawberry Fields Forever”
Después de abandonar las giras, The Beatles concentraron sus esfuerzos a convertirse en mejores músicos y compositores, pasando horas y horas en el estudio para crear algunas de sus obras más importantes. Pero además de crecer en sus respectivos instrumentos, también comenzaron a incorporar nuevos sonidos en sus canciones y por supuesto que en ellos estaban los teclados.
A pesar de que las versiones acústicas de “Strawberry Fields Forever” suenan increíbles y melancólicas, la verdad es que cuando usaron el mellotron (un teclado considerado como el primer sampler de la historia) para el intro de esta canción, elevaron por completo la letra nostálgica que John Lennon escribió sobre su infancia en Liverpool. Y sin duda, fue el sonido que faltaba para transformar este temazo en una obra maestra.
Van Halen – “Jump”
Para 1983, Van Halen ya era una de las bandas más conocidas de su generación, sobre todo por ser abanderados de una nueva ola de agrupaciones de hard rock, que creaban rolas que te volaban la cabeza y las acompañaban con presentaciones alucinantes cuando se subían al escenario. Sin embargo, en aquel año lanzaron una canción que les daría la fama mundial y no es conocida precisamente por su sonido rockero: sí, hablamos de “Jump”.
Seguramente cuando piensan en esta rola, lo primero que se les venga a la mente es el famoso intro de sintetizador –que por cierto, tocó el mismísimo Eddie Vedder tanto en el estudio como en los shows en vivo–. Y no los culpamos, porque esos cuantos acordes fueron muy importantes para que el tema se popularizara y se quedara para siempre en nuestras mentes. Porque siendo honestos, recordamos más esa parte que el solo que Eddie le metió.
The Who – “Baba O’ Riley”
Cuando pensamos en The Who se nos viene a la mente los guitarrazos de Pete Townshend, la potente base rítmica que armaron con los enormes Keith Moon y John Entwistle y por supuesto, la espectacular voz y presencia de Roger Daltrey. Aunque arrancaron como una banda típica de rock con una actitud sumamente desafiante, para la segunda etapa de su carrera, le entraron a nuevos sonidos y eso se notó cuando empezaron a usar teclados.
Y quizá la rola ideal para apreciar por completo la evolución musical de la agrupación británica es “Baba O’Riley”. Por supuesto que cada quien está increíble en esta canción y le metieron todo su talento para crear una obra de arte, pero lo que hizo Townshend con el órgano eléctrico fue simplemente alucinante, pues creó un ritmo juguetón que resultó ser pieza clave de esta composición.
Deep Purple – “Highway Star”
Deep Purple son pioneros del hard rock y el heavy metal, pero también fueron de los primeros en tener a un tecladista como una parte importante del sonido de la banda. Jon Lord fue el musicazo que asumió este papel y logró meter su estilo en medio de los guitarrazos de un grande como Ritchie Blackmore. Pero. hubo una canción donde ambos se lucieron y que quizá muchos tienen presente porque es una de las más famosa de esta agrupación, ni más ni menos que “Highway Star”.
Y es que a pesar de que esta rola podría funcionar por sí solo gracias a las guitarras, bajo y batería, el órgano es una parte fundamental que le dio a ese temazo una vibra completamente diferente. Además, Jon se rifó un solo impresionante que nos demuestra que los teclados también pueden lucirse al nivel de la lira.
Joy Division – “Love Will Tear Us Apart”
Por último pero no menos importante, queremos hablar de una banda que sabemos que tiene muchos fans por acá, Joy Divison. En cuestión de años, Ian Curtis, Bernard Sumner, Peter Hook y Stepehen Morris se consolidaron como una de las agrupaciones más importantes en la historia del post-punk e influenciaron a toda una nueva generación que encontraron en ellos una inspiración para componer sus propias rolas.
Sin embargo, de entre todos los rolones que la banda de Manchester nos dejó, “Love Will Tear Us Apart” es quizá la muestra perfecta de lo que querían proyectar a través de sus canciones. A pesar de que la pura base rítmica con el bajo de Hook y la batería de Morris ya era perfecta, decidieron agregarle unos sintetizadores tocados por Sumner que le agregaron una vibra sombría a este clásico de todos los tiempos y que quizá, nada hubiera sido lo mismo sin estos teclados.