Diciembre es el mes donde las piñatas están en todas partes gracias a las posadas, esas fiestas con toque religioso en la que varias personas, durante nueve días antes de Navidad, recrean la peregrinación que María y José hicieron para que el niño Jesús pudiera nacer sano y salvo, en la cual pedían posada para poder descansar donde les dieran chance. Obvio no creemos que lo hicieran con velitas en vasitos de unicel, pero entienden la idea.
Regresando al tema, además de que las personas que organizan posada regalan ponche, fruta, colaciones, galletas de animalitos y hasta comida, uno de los momentos divertidos viene al romper la piñata, que cuenta con siete picos –cada uno representa los pecados capitales– y que al golpearla simboliza la lucha del hombre contra sus pecados.
Quienes le han pegado a la piñata en una posada –o en alguna fiesta, aunque ahí el significado es diferente porque es mera diversión–, saben que tienen que hacerlo vendados de los ojos y con ayuda de un palo de madera. Claro, a menos que seas de Mérida, Yucatán, donde al parecer la gente se agarra a las piñatas como si fueran personas. O sea, a puro puño limpio. ¡¿QUÉ?!
No es broma. Una usuaria de Twitter llamada Dianasaurio (@cerveradi) comentó a través de su cuenta que en una captura de pantalla vio que la gente de Mérida rompe las piñatas con las manos, algo que confirmó con la ayuda de su cuñada que es de allá.
Sin embargo, esta chica no le creyó (no la culpamos) y se puso a investigar más a fondo a través de YouTube, en donde encontró que en verdad los niños –y personas en general– se agarran con las piñatas a puño cerrado, y a veces con una bolsita recubriendo la mano para que no les duela tanto (y tengan algo en qué guardar sus dulces por si la rompen).
Así que busqué en YouTube videos de partidas de piñatas en Mérida, y descubrí que sí, efectivamente, los niños rompen las piñatas dándoles un puñetazo. A veces a puño limpio, a veces con una bolsa que luego usan para recoger los dulces.https://t.co/YvzfPGbNbJ
— Dianasaurio 🦖 (@cerveradi) December 20, 2019
Y eso no es todo, pues al parecer esta tradición no sólo se da en Mérida, también la practican en otras partes de Yucatán.
No es exclusivo de la capital, Mérida, también lo practican en otros pueblos del estado de Yucatán, como Motul (adjunto link y también un video para que no tengan que chutarse 7 minutos)https://t.co/o6Gns3vEVH pic.twitter.com/8hVGOkZlgF
— Dianasaurio 🦖 (@cerveradi) December 20, 2019
Pues no se ustedes, pero a nosotros esto sí nos deja más confundidos que Pati Chapoy en un concierto de Björk.
¿No les duelen las manos a los niños? ¿Eso quiero decir que los de Yucatán son buenos para los guamazos? ¿Por qué no usan un palo para pegarle a la piñata? Muchas preguntas y pocas respuestas, pero por ahora las que más nos causan curiosidad son las siguientes:
Además ¿qué sucede con la industria de los palos decorados para romper piñatas?, ¿existió alguna vez en Yucatán?, si sí, ¿de qué viven ahora esas personas?; si no, ¿por qué nunca se les ha ocurrido?, ¿no han visto a sus vecinos campechanos que SÍ usan palos para partir la piñata?
— Dianasaurio 🦖 (@cerveradi) December 20, 2019