Todos en la vida cometemos errores, aunque algunas personas hacen de estos una experiencia que se vuelve viral el internet. Por ejemplo, tenemos el caso de un sujeto que no sólo frustró su propio intento de asalto, sino que hizo el ridículo de su vida y fue el objeto de burla de muchas personas que lo vieron.
La historia tuvo lugar en una tienda de vaporizadores, porque además de robar, la gente también busca alternativas para dejar de fumar. Era un día común para la empleada de este lugar, sin mucha clientela haciendo ruido, hasta que apareció un tipo con lentes oscuros y muy malas intenciones.
Momentos después de haber entrado, el hombre sospechoso sacó un arma de fuego y se dispuso a realizar su fechoría. Pero antes de que piensen que hubo un robo elaborado, con escenas de acción y todo, reventaremos su burbuja de ilusiones diciéndoles que todo el asunto terminó mucho antes de que alguien pudiera darse cuenta de lo que sucedía.
¿Vieron lo que ocurrió? Este pobre diablo ladrón tiró su instrumento de “trabajo” justo cuando lo sacaba de su escondite. Uno ya no sabe si morirse de risa por cómo el tipo sale del lugar dando brinquitos y subiéndose los pantalones, sentir decepción por lo rápido que terminó o incluso experimentar pena ajena por el oso que hizo.
Si buscan una lección después de todo esto, podemos darles más de una: un vaporizador no solucionará otras costumbres, aunque es un inicio; robar es malo y el karma es horrible para algunas personas; si eran ese familiar que siempre tiraba la jarra con agua de limón cuando todos se sentaban a comer, tal vez lo mejor no sea dedicarse al crimen, porque podrían salir lastimados o quedar como unos tontos en internet.