Actualmente, los seres humanos nos encontramos dentro de una crisis en la que cuestionamos nuestro objetivo o lugar en el planeta Tierra. La crisis medioambiental o emergencia climática, la extinción inminente de millones de especies, la ruptura del equilibro, las guerras, las violaciones abiertas a los derechos humanos de los grupos más vulnerables… todos estos temas, provocados por los mismos humanos, nos han hecho pensar que nosotros solitos nos estamos llevando a un fin que no se pinta muy amable (y con nosotros, arrastrar todo lo que no tiene consciencia de poder).
Sin embargo y a pesar de todo esto, y cómo se han ido agravando las cosas, siempre queda una esperanza para los seres humanos que vemos a través de individuos ejemplares que luchan por mejorar las cosas, o bien, aquellos héroes anónimos que nos muestran que la naturaleza siempre será impresionante, y nosotros con ella porque formamos parte de la misma (aunque a veces se nos olvide). Quizá suene un poco confuso, y lo es, pero a lo que vamos con esto es el caso de Dagmar Turner y los doctores de un hospital en Londres…
Dagmar Turner es una violinista de 53 años que toca en la Isle of Wight Symphony Orchestra, le detectaron un tumor cerebral. El crecimiento de este tumor, así como una operación para removerlo, podía afectar su habilidad de tocar el violín, lo cual sería catastrófico tanto en el ámbito profesional como emocional. Ante el riesgo, los doctores decidieron operar a Turner, pero no de la manera convencional: sino con el paciente despierto y mientras interpretaba algunas canciones con el violín.
Pues bien. Turner fue intervenida en el King’s College Hospital de Londres para remover 90 por ciento del tumor cerebral, y los doctores decidieron que la operarían despierta con el objetivo de que tocara algunas piezas musicales durante el procedimiento. ¿Para qué? Para que los cirujanos identificaran las áreas que se activan en su cerebro mientras toca un instrumento y las áreas que son responsables del lenguaje y el movimiento. Esto, a su vez, para evitar que los doctores dañaran áreas esenciales que controlan el movimiento de las manos, por ejemplo.
“Logramos remover 90 por ciento del tumor, incluidas las áreas en las que había una posible actividad de riesgo, todo mientras permanecía la funcionalidad completa de la mano izquierda“, comentó el profesor Keyoumars Ashkan, neurocirujano del hospital ubicado en Londres. Antes de la cirugía, un grupo de médicos estuvieron dos horas analizando el cerebro de Turner (como realizar un mapa) para descubrir cuáles eran las áreas que se activan cuando toca el violín.
No es la primera vez que sucede esto, pero no por eso deja de ser impresionante. En 2017, un hombre llamado Abhishek Prasad tocó la guitarra mientras le realizaban una neurocirugía de cuatro horas en la India. Este procedimiento se llevó a cabo para mejorar lo que se conoce como distonía focal del músico, es decir, la contracción de músculos que surgen a partir de tocar instrumentos musicales.
