Para los que no lo sepan, existe un sitio asombroso llamado El Gran Museo de Egipto. Se trata de uno de los proyectos más ambiciosos que se han hecho a lo largo de la historia.
Éste es, sin duda, el recinto cultural más grande que se ha construido a propósito de una civilización. Un espacio inmenso, ubicado frente a las pirámides de Giza, que contará en sus salas la historia de Egipto, una de las culturas más importantes del planeta.
Su edificación comenzó hace al menos dos décadas, y aunque ya está listo para abrir de par en par sus puertas desde el 30 de septiembre del 2022, todavía no se puede entrar.
El gobierno de Egipto quiere usar su inauguración como un motor para el turismo del país, que no sólo cayó por la pandemia, sino por la guerra de Ucrania y Rusia.
No obstante, el museo promete convertirse en una maravilla del mundo, y desde el anuncio de su apertura, miles y miles de entusiastas y expertos en la historia de esta civilización han mostrado un gran interés en recorrerlo.
En sólo unas horas, los visitantes podrán hacer un viaje extenuante por siglos y siglos que cubren la prehistoria, los faraones, las leyendas y los últimos días del Imperio Romano.
Y aunque México y Egipto se ubican a más de 12 mil kilómetros de distancia, un evento como este –en el que podemos descubrir los orígenes de nuestra civilización– nos incumbe a todas y todos los terrícolas.
¿Cómo fue la construcción del Gran Museo de Egipto?
La idea original de este sitio era muy sencilla, darle una casa más moderna a las huellas que dejó la antigua civilización egipcia, dado que el Museo del Cairo ya no tenía espacio para darle refugio a los nuevos hallazgos arqueológicos y al regreso de ciertas piezas al país africano.
Su edificación, que mide más de 480 mil metros cuadrados, tardó más de 20 años en concluirse. Entre otras cosas por lo monumental del edificio y porque un cuantioso grupo de curadores y museógrafos se dedicaron a recabar los ornamentos egipcios que habían sido robados o extraídos del territorio sin permiso.
Es así como actualmente, este museo alberga más de 100 mil reliquias de la antigüedad. Solo 45 mil fueron sacadas directamente de museos europeos que las exhibían con total impunidad. Tras el regreso a su lugar de origen, los ornamentos se restauraron.
Asimismo, en el proceso de recuperar el pasado, los investigadores descubrieron decenas de piezas que nunca habían sido expuestas, y sin duda resultarán asombrosas para todos los entusiastas de la historia, porque ayudan a juntar las piezas del rompecabezas que quedó tras las múltiples invasiones extranjeras a esta nación.
Otra de las atracciones del museo es su ubicación. Fue construido junto a las famosísimas pirámides de Giza.
Esto quiere decir que los visitantes casi podrán contemplar estas maravillas del mundo desde las ventanas del recinto. Además, el museo está a solo a dos kilómetros de Cairo, lo que sin duda facilitará mucho la llegada tanto de locales como de turistas.
¿Qué ver en el Gran Museo de Egipto?
Al llegar, lo primero que se puede apreciar es un amplio jardín en el que hay un obelisco suspendido en un estanque, con la forma de Ramsés II. También hay un gran muro de jeroglíficos que rinden homenaje no solo a la historia del país, sino al hecho de que Egipto le regaló la escritura al mundo.
La puerta de entrada tiene la forma de un gran triángulo que encubre dos más pequeños.
Esta fachada tan estilizada fue hecha con el único objetivo de que a través de ella se pueda contemplar el conjunto de bases piramidales de Giza. Para los arquitectos la idea era que las personas pudieran sentir la atmósfera del sitio, figurativamente y literalmente.
También en la entrada hay unas escalinatas altas en las que están distribuidas un grupo de estatuas de Sesostris I. Un conjunto de piezas que se cree fueron realizadas en el año 1940 antes de Cristo.
Aunque por ahora las puertas están cerradas, se sabe que las galerías estrellas serás dos salas dedicadas a Tutankhamun. Este par de salones exhibirán al menos 5 mil objetos. Representan la colección más grande que se ha visto desde que su tumba fue descubierta en 1922.
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He aquí un nuevo espacio para poner en esa lista infinita de cosas que hacer antes de morirnos.
