Los paseos por los Pueblos Mágicos que hay en México se pueden volver un hábito muy placentero para cualquiera que quiera olvidarse del tedio y la rutina por un rato. A veces con un viaje de ida y vuelta es suficiente y Tepoztlán, en Morelos, es el destino perfecto para hacer esto.

Fotografía: Unsplash

Si salimos de la CDMX, el viaje de 80 km nos hará creer que estamos al lado de casa, después de todo dura poco menos de una hora si vamos en coche y casi dos horas si salimos de la Terminal de Taxqueña.

Lo único que necesitamos es una mochila, calzado cómodo y muchas ganas de recorrer uno de los mercados más interesantes de la república, así como de descubrir la historia de este pueblo tan importante.

Para disfrutar del cálido “Tepoz”  

Después del viaje de hora y media estaremos en el “lugar del hacha de cobre” (del náhuatl), el famoso Tepoztlán, que es perfecto para recorrerlo a pie por sus calles, muchas empedradas y llenas de naturaleza endéica.

Una caminata para reconocer el pueblo

Su aire típico cautiva a cualquiera por su colorido y su ambiente tranquilo con un paisaje adornado por la cima del Tepozteco. Una montaña que se puede caminar hasta la cima, donde hay una base piramidal.

Fotografía: Wikipedia

Por otro lado, si vamos en miércoles o en domingo nos va a tocar el tianguis con sus artesanías. Este mercado es uno de los más emblemáticos del país por su gran variedad de comida prehispánica y por sus tortillas inmensas.

Algo delicioso y típico para la hora de comer 

Tampoco puede faltar una parada en algún restaurante . Ya ambientados y contagiados del folklore local podemos visitar Cuatecomate, que ofrece comida prehispánica tradicional en el centro.

¿Qué tal unas tlaltequeadas o unos ricos huazontles bien preparados para recargar energías? 

Fotografía: Facebook

Una actividad cultural 

El museo del Ex Convento de Tepoztlán es un lugar emblemático. Construido en el siglo XVI bajo las órdenes de los monjes dominicos, en sus salas se puede aprender de las costumbres y tradiciones de los pueblos originales de la región.

Además es un Centro de documentación histórica y uno de los espacios arquitectónicos más interesantes por la colección de ilustraciones en sus muros.

Fotografía: Unsplash

Que no falte la subida al Tepozteco 

El célebre cerro del Tepozteco tiene una zona arqueológica en su cima. En la antigüedad era un lugar de adoración para los dioses guerreros mexicas.

Gracias a su historia es reconocido internacionalmente. Cuenta la leyenda que de ahí son el dios Ehécatl y el héroe Tepoztécatl.

Hay que destacar que la subida no es fácil, pero de verdad vale la pena ya que mientras se recorre la montaña se pueden admirar especies endémicas de flora y fauna y además respirar el verde que se ve en todos lados.

Fotografía: Facebook

Y si nos queremos quedar en Tepoztlán

Si el paseo de un día se alarga y queremos pasar la noche en Tepoztlán, habrá gran cantidad de alojamientos para escoger. ¿Qué tal algo relajado con masaje o temazcal? En Horus hotel holístico se puede disfrutar de la noche morelense en una acogedora cabaña ecológica.

Fotografía: Facebook

Con un paseo por Tepoztlán veremos que es un lugar mágico, lleno de curiosidades y de un ambiente cálido y agradable donde siempre vamos a encontrar algo nuevo. Seguramente hará falta más que un día para recorrerlo. Solo hay que dejarse llevar.

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