En esta vida todos pensamos que las luminarias de Hollywood son reconocidos por las personas a donde quiera que vayan, pero parece que Tom Hanks no corre con la misma suerte; ya que en un festival le negaron la venta de alcohol por no poder verificar su edad. Ah caray.
Así lo contó el propio Hanks en el programa de Ellen DeGeneres. La curiosa historia sucedió hace un mes, en el Stagecoach Music Festival en Indio, California; cuando Tom acompañó a su esposa, la cantante Rita Wilson, a una presentación en dicho festival. Antes de que ella subiera al escenario, el actor se fue a dar una vuelta para ver que encontraba, y con el calor del desierto obviamente le dieron ganas de comprarse una chela, como a todo el mundo.
Tom Hanks supports wife/performer Rita Wilson at the Stagecoach festival – where they also ran into Lynyrd Skynyrd pic.twitter.com/EB0xbgNOa8
— A. Movies (@AssholeMovies) 30 de abril de 2019
Pero el pobre Tom regresó con las manos vacías porque no pudo comprarse una sola cerveza. Según Hanks, cuatro vendedores se negaron a venderle alcohol porque su identificación no está verificada, seguramente gritó como cuando perdió a Wilson en Náufrago. Lo que se le olvida a los que venden las chelas es que el buen Tom Hanks no es un chavito de 17 años, acaba de cumplir 62, ya está mayorcito como para que le estén pidiendo identificación. La verdad.
En su desesperación, intentó sobornarlos diciéndoles que “los iba a llevar a la premiere de Toy Story 4” pero no le funcionó. Obviamente él lo tomó como un momento muy gracioso y no dijo nada, todavía los felicitó por hacer su trabajo bien; respetando la política de venta de consumo de alcohol. Puedes checar la entrevista completa con Ellen por acá.
Al final, no supimos qué fue lo que Hanks se echó durante ese festival, pero mejor hubiera hecho lo que Forrest cuando visitó la Casa Blanca; entrarle a todos los Dr. Pepper que pudiera tomarse para que no le diera sed.