Aunque muchos no se atreven ni a salir en playera de manga corta a la calle, bien que andan imaginándose en echar pasión en lugares públicos… Al menos eso revela la encuesta realizada por la Asociación Mexicana de Salud Sexual (Amssac), la cual se dio a la tarea de conocer cuáles son las fantasías de los nacionales.

Pero antes de que emitan su opinión respecto a como la gente imagina dejar pegajosas las bancas de parques o cines, deben de saber que si bien el sexo en público es atrayente (90% de los encuestados lo mencionaron), echar patrulla en la intimidad todavía sigue siendo la norma en el país. Nada más chequen este contundente dato: 98% de las personas consultadas refirió que le prende la idea de meter la berenjena al horno: tener sexo en la cocina.

Pues qué le vamos a hacer, si somos bastante caseros… o mentirosos, ya que el 97% señaló que su fantasía es tener relaciones con una pareja amada. Ahhhhhh. Eso si, cuando el amor llega y se decide tener más emoción, 80% de los hombres y 70% de las mujeres dijo imaginar en participar en una horchata… orgía, pues.

Pero de pensarlo a hacerlo es un gran paso, así que hay que tener en consideración que el tener fantasías es un factor para una sexualidad plena y satisfactoria, mencionó Eusebio Rubio, directos de la Amssac… y si bien las cosas que pasan por la cabeza de los mexicanos no están tan gruesas, espérense un rato: “estamos en un proceso de cambio. La sociedad se mueve hacia la apertura”.

La encuesta realizada a mil 104 personas de entre 21 y 40 años, también reveló que 78% de las mujeres y 48% de los hombres ha fantaseado con darle pasión a alguien de su mismo sexo. Respecto al intercambio de parejas, 55% de las féminas y 65% de los varones le dieron el visto bueno. Por otra parte, 78% y 95% (mujeres, hombres, respectivamente), reconoció que han imaginado cómo sería echarse a una persona conocida… no especificando a quién. Así que si sienten la mirada del Godinez de a lado, ya saben.

Según Rubio, hablar de temas sexuales es una sana forma de aprender sobre la sexualidad… y no sólo el clásico protocolo “meter-sacar”, sino también incluir el erotismo y la intimidad. Cuando se calla el asunto hay dudas y angustia… incluso puede acarrear enfermedades y muerte, señala el especialista.

Por ejemplo, aquellos que no echan patrulla o que lo hacen escasamente (una vez al mes) tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades coronarias (40%)… Chicas, si el hombre a la primera quiere aplicarles la inyección “intrapiernosa”, no es porque el cerebro no de para pensar en otra cosa, sino por asuntos de salud… por su vida.

*Vía La Jornada

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