Típico que te vas de exploración y pasa un pingüino amarillo frente a tus narices. Justo así le pasó al fotógrafo de vida silvestre Yves Adams, quien creyó haber visto de todo a través de su lente, pero durante un viaje por el Atlántico, descubrió a esta ave tan singular y posiblemente, única en el mundo.
Todo comenzó cuando el fotógrafo belga y un grupo de exploradores decidieron hacer una parada en una isla de Georgia del Sur, para fotografiar una colonia de más de 120 mil pingüinos rey, con la esperanza de encontrar uno que otro modelo entre los elegantes animales vestidos de blanco y negro. Sin embargo, al enfocar la lente, sus ojos no creían lo que estaban viendo.
El hombre de 43 años, ha capturado paisajes gélidos, decenas de aves, e incluso osos polares a un metro de distancia, pero, nunca se había topado con algo parecido, preguntó a sus colegas, pero, estaban tan sorprendidos como él. Las plumas doradas del pingüino amarillo, resaltaban entre la sobriedad de la nieve y el resto de las aves con casco negro. ¡Eureka!
Como era de esperarse, Adams compartió una serie de fotografías del pingüino amarillo a través de su cuenta de Instagram. Aunque el evento sucedió en 2019, el fantástico descubrimiento no pasó desapercibido por sus seguidores, quienes se mostraron fascinados con el descubrimiento.
“¡Ganando la lotería de la naturaleza, al apreciar al pingüino rey más hermoso y poder fotografiarlo! Mientras desempacaba los botes, después de aterrizar en una playa remota en la isla de Georgia del Sur, simplemente este pingüino rey caminó directamente en nuestra dirección, en medio de un caos lleno de elefantes marinos, lobos finos antárticos, y miles de otros pingüinos rey ¡Qué suerte tuve!”, escribió Adams.
Defecto genético
Lo más sorprendente es que lo singular de sus plumas se debe a un defecto genético. Al igual que la heterocromía y el albinismo en las personas, esta particularidad, se debe a que las células no producen la suficiente cantidad de pigmento en la melanina, de ahí que este pingüino amarillo, destaca de los demás.
Adams, se inspira en la fuerza de la naturaleza para tomar sus mejores fotografías. Aunque desde temprana edad, le llamó la atención montarse en su bici e ir en busca de singulares postales y aves inusuales para capturarlas con su cámara. Después de graduarse como arquitecto de paisaje, se especializó en la fotografía desde hace 25 años.
Ha recorrido todos los continentes y fotografiado toda clase de especies, sin embargo, coincide en que la serie de fotos de este pingüino amarillo, que bien puede ser invitado a una fiesta de disfraces de pollos, es lo mejor que le ha pasado. Aunque, no es la primera vez que captan un ejemplar de esta especie albino, en el 2020, un fotógrafo encontró un pingüino totalmente blanco.