Seguro les ha pasado que están en la oficina o su lugar de trabajo, tienen una gran cantidad de pendientes y, en vez de ocuparse en lo que tienen que hacer, están viendo videos de gatos, memes o cualquier otra cosa menos lo que realmente deberían estar haciendo.
Seguramente se sienten mal de ser tan ineficientes pero ya no se preocupen tanto ya que, según un estudio, las personas inteligentes no son muy buenas para concentrarse en el trabajo.
Según este estudio las personas inteligentes tienden a distraerse con mayor facilidad y tienen dificultades al prioritizar ideas, lo que los puede poner nerviosos cuando tienen que hacer varias cosas al mismo tiempo.
Además, los avances tecnológicos han hecho que sea aún más difícil para los trabajadores el mantenerse concentrados ya que la persona común revisa sus smartphones cada dos o tres minutos.
Según la investigación de una compañía de soluciones en lugares de trabajo llamada Steelcase, casi la mitad de los trabajadores encuestados para el estudio de 17 países dijeron que les cuesta trabajo concentrarse en las oficinas.
El Dr. Ned Hallowell, psiquiatra, afirmó que las personas inteligentes tienen problemas para poner prioridades porque tratan de lidiar con cada idea como va surgiendo, llevando a la personas a una sensación de no poder lidiar con la carga de trabajo como un todo.
Esto significa que algunas de las personas que fueron contratadas por alguna empresa por su inteligencia, fallan al cumplir las expectativas de sus jefes así como las propias.
El doctor mencionó:
Las maneras en las que trabajamos están cambiando más rápido que nunca y el cerebro esta siendo sometido al estrés y distracciones lo que puede llevar a una sobrecarga y las estadísticas muestran que las distracciones en lugares de trabajo están en aumento.
Así que ya saben, si se distraen fácilmente no tienen que sentirse mal porque, probablemente, sean más listos que los demás… aunque eso no garantiza que conserven su empleo.
