Lo que necesitas saber:
Con la llegada de la primavera la naturaleza renueva su ciclo. Visita alguno de los espectaculares campos de flores de nuestro país sin tener que alejarte mucho de la CDMX.
Se acerca la primavera y la época de chamarras gruesas, abrigos y no salir de casa se queda atrás y con la llegada del calorcito. Hay que tomarse un respiro y si tenemos la oportunidad, admirar cómo es que la naturaleza se renueva. Se viene la primavera y estos son algunos campos de flores para visitar en México sin alejarse mucho de la CDMX.
Así es. No nos faltan los campos rebosantes de flores en sus diferentes especies en lugares a los que no hay que ir muy lejos para testificar el renacimiento de la estación más relajada del año. Agarra tu mochila y date una vuelta por cualquiera de estos plantíos y jardines tan singulares.
Las flores son sinónimo de lo suave y hermoso. No hay que perderse el espectáculo de alguno de los espléndidos campos de flores que nos regalan las tierras mexicanas. Relájate y olvídate del frío. Llévate tu cámara y atrapa algunos de los mejores momentos de la naturaleza en estos sitios únicos.
Amealco, Querétaro
En el municipio de Amealco de Bonfil vas a encontrar campos y cerros llenos de flores durante toda la temporada de calor. La humedad de sus terrenos y sus cuerpos de agua ayudan a que las flores de todo tipo crezcan en abundancia. No te puedes perder su Festival de las Flores, que se celebra en marzo para recibir la entrada de la primavera.
Amealco también es el lugar de nacimiento de Lele, o María, la muñeca de trapo de origen otomí que en su versión de tamaño gigante ha visitado varias ciudades del país. Este pueblo está a tres horas de la capital mexicana.
San Francisco Putla, Tenango del Valle, Estado de México
En esta localidad vas a encontrar campos llenos de flores durante todo el año. Gran parte de la producción de flores de México se concentra en el Estado de México y San Francisco Putla es famoso por su hermosura y también porque para las festividades de Día de Muertos sus sembradíos son de los más generosos en flores de cempasúchil, nube y alhelí.
Es un lugar tradicional para la floricultura, con cientos de productores que se esmeran en tener flores de todo tipo, sobre todo para San Valentín, el Día de las Madres y la temporada de muertos. El viaje es de una hora y media desde la CDMX.
Atlixco de las Flores, Puebla
Es otro lugar reconocido por su gran producción de flor de cempasúchil para las ofrendas del Día de Muertos, pero de seguro vas a encontrar flores de todo tipo durante cada época del año. Sus viveros y campos de cultivo están abiertos para los visitantes y en primavera hay una gran abundancia de tulipanes.
Las calles de Atlixco también se adornan con flores y está su Jardín Mágico, donde hay espectaculares esculturas floridas. Dos horas de viaje son suficientes para encontrar espectaculares paisajes coloridos bajo el sol.
Dolores Hidalgo, Guanajuato
Este Pueblo Mágico, conocido oficialmente como “Dolores Cuna de la Independencia Nacional” aloja varios campos de flores que van a dejar impresionado a cualquiera. Por lo general son grandes plantíos de lavanda y muchos de ellos admiten visitas. Estos campos alcanzan un morado más intenso mientras se acerca el verano. A menos de una hora de ahí está el municipio de Mineral de Pozos, con más plantíos de lavanda y paisajes inolvidables.
El viaje desde la Ciudad de México es de aproximadamente cuatro horas, pero no te vas a arrepentir de darte una escapada de fin de semana. Además, puedes darte una vuelta por el pueblo que es la cuna de nuestra historia.
Jardines de México, Tehuixtla, Morelos
Si quieres visitar un lugar florido y que pudiera formar parte de un cuento como el de Alicia en el País de las Maravillas, date una vuelta por este lugar lleno de armonía, fuentes magníficas y esculturas florales. El lugar está dividido en ocho jardines temáticos como el tropical, el japonés, el italiano o su laberinto de los sentidos.
Jardines de México está a dos horas desde la capital y a media hora de Cuernavaca. Es perfecto para dar un paseo fuera de lo común en un viaje de ida y vuelta. Se viene la primavera y no puedes perderte la visita a alguno de los campos de flores que hay en México.