Una hora y cuarenta minutos de pura adrenalina. Personas que desde las 8 de la noche del día anterior con todo y banquito, cobijas y donas (obviamente).
En esta ocasión, la dinámica funcionaba a base de equipos; cada equipo (de dos personas) contaba con padrinos de primerísimo nivel: José Antonio Pontón (experto en tecnología), Ximena Herrera (actriz) y Jean Duverger (cronista). La mecánica fue básicamente la misma que el año pasado: se les dio una lista de productos seleccionados en la tienda y la misión era recoger todo en la lista en el menor tiempo posible.
Y bueno; si ya seguías este magno evento deportivo catalogado por los expertos como deporte extremo (expertos = nosotros), sabes que se elige una tienda que NO se cierra, por lo que parte de los ‘obstáculos’ a seguir son los clientes quienes, seguramente, apreciaron a tener adultos corriendo por los pasillos. Agréguenle pandas bailando en lugares inesperados y un reloj a contratiempo y tendrán el Grand Prix de Sopitas, presentado por Sam’s Club.
Después de un maratón que anunciara al definitivo ganador del premio mayor, el equipo naranja, nuestros padrinos jugaron a El Rey Pide, regalando también artículos de la tienda a a los asistentes (¡algunos que estaban desde la 1am!): teléfonos, un hoverboard, una lap-top, ¡todo! ¡la casa por la ventana, vaya!
Al final, había una sorpresa: el Donitas Challenge. Y bueno, pon a 4 adultos con un bowl lleno de donitas cada uno y el reto era ponerse la mayor cantidad de donitas en la boca. Bastante extremo este deporte, pero… ¿qué ganaban estos atletas de alto rendimiento?
Nadie sabe. Eso no importaba. Lo que sí, es que al final a nuestro flamante ganador, Sopitas le dio a elegir entre varios artículos de Star Wars y un oso gigante de peluche. Premios en serio. Pero aquí el premio mayor fue el gran ambiente, el hacer feliz a varias personas regalando distintos artículos mientras pasaban un buen rato y comenzar las festividades del Buen Fin con el pie derecho.
