Un grupo de personas que luchan por el derecho a estar bien pacheco decidió salir a las calles de Washington D.C. el 20 de enero. El mismo día en el que Donald Trump asumirá la presidencia de Estados Unidos. Pero no lo harán solos, sino que estarán acompañados de miles porros que planean entregar a la gente.
La marihuana contenida en estos excelentes regalos fue cultivada legalmente. La idea es que estos 4200 porros se enciendan simultáneamente 4 minutos y 20 segundos después de que el discurso de Trump comience. Tal vez podamos unirnos a la distancia para apoyar a nuestros vecinos del norte.
La finalidad es que Trump apoye la legalización de la marihuana en los 50 estados que conforman la Unión Americana. Como la mota es legal en D.C., es poco probable que la policía haga algo en contra de los manifestantes. Lo preocupante es que a nivel federal su consumo todavía está penalizado. Por lo tanto estos héroes evitarán acercarse a zonas en las que sea ilegal quemarle las patas al diablo.
Según los activistas que están organizando este movimiento –se hacen llamar DCMJ– el hecho de entregar porros de mota es un acto político. Entre otras cosas, están preocupados por la postura tibia que Trump ha mantenido respecto a este tema. Invitan a todos aquellos interesados por la legalización de esta droga a que hagan que toda la ciudad huela a chamarra de Otto para que se sienta la presión.
