Hay policías buenos en lo que hacen, policías malos… y luego están estos, que no son precisamente malos en su labor, pero este particular caso pone a este grupo de oficiales escoceses en un grupo aparte.
La llamada de un hombre local alertó a las autoridades sobre la presencia de un tigre en su propiedad. Respondiendo al llamado del deber, los policías fueron a ayudar inmediatamente con lo que tenían a su disposición, como vehículos y armas.
“Tuve el susto de mi vida“, dijo Bruce Grubb, el granjero que hizo el llamado a los oficiales, quien tenía una pequeña reunión en su casa. El hombre se dio cuenta de la presencia de lo que a lo lejos parecía un animal cuando salió a revisar a sus vacas. “Salí a vigilar, porque algunas vacas están embarazadas y podrían dar a luz en cualquier momento; encendí mi linterna y lo vi acostado”.
Cuando los oficiales llegaron, rodearon por completo la zona, e incluso llamaron al zoológico para saber si el animal se había escapado de allí.
Por 45 intensos minutos, se mantuvieron quietos en espera de alguna acción del animal. Sin embargo, nada hizo. Pasaron los minutos y seguía sin moverse, por lo que los oficiales se acercaron para descubrir…
…¡Un peluche!
El incidente fue confirmado por la División Policiaca del Noreste de Escocia, quienes también aclararon el que sus oficiales llevaran armas, se debe a que ante cualquier riesgo potencial se considera una medida para proteger al público y a los mismos elementos.
“Apreciamos que haya sido una falsa alarma hecha con buena intención”, finaliza su comunicado.
Qué gusto que todo haya quedado en una anécdota divertida, porque definitivamente es mejor reírse del hecho una semana, que correr por tu vida unos minutos.