Sabemos que muchas veces, cuando el cuerpo nos pide ciertas cosas, debemos darle gusto. Pero también deberíamos saber cuando diferenciar entré los momentos adecuados e inapropiados para dejarse llevar por los deseos carnales.
Todo comenzó en Bruselas, capital de Bélgica, ocho días después de los ataques ocurridos en París, donde se suponía que se había levantado una gran alerta, con la cual se debía mantener la ciudad bajo la vigilancia del ejército belga para la búsqueda de personas sospechosas y potenciales terroristas.
En lugar de eso, dos oficiales decidieron que debían descuidar su deber y así formar parte de una orgía junto con otras 10 personas en una estación.
“Ocho soldados y dos mujeres policía realizaron actos obscenos en una estación de policía en el vecindario de Ganshoren, al norte de Molenbeek, donde había oficiales en búsqueda de sospechosos de terrorismo en conexión con con los ataques en París suscitados el 13 de noviembre. Bruselas se encontraba en completo confinamiento en el momento de este incidente.”
El ejército belga ya ha recibido bastantes críticas debido a la conducta de sus soldados durante la operación antiterrorista. Se realizó una investigación después de haber visto a un soldado uniformado con una bolsa de compras, mientras había patrullaje en Bruselas.
Vía politico