Después de tener en ascuas a sus fans y a sus más grandes detractores por las últimas dos semanas, Felix Kjellberg -mejor conocido por su nombre de YouTuber, PewDiePie– cumplió su promesa de borrar su canal si es que llegaba a los 50 millones de suscriptores…
¿En serio creían que lo iba a hacer?
Demostrándonos por qué es considerado como el mejor YouTuber -y sacándole provecho a sus años de estudio en economía industrial– PewDiePie tuvo en la palma de su mano a sus muchos detractores, a quienes controló como viles marionetas:
¡Bailen marionetas, bailen!
En efecto, Felix sí borró su canal… uno secundario que, al parecer, solamente abrió por los puros lols. Al final, todo esto era una broma (que nadie realmente entiende); algo que no debería de sorprendernos, ya que Felix es un maestro del troleo.
Por supuesto, la ola de mensajes donde le recuerdan a su mamá criticándolo, no tardaron en hacerse presentes; pero viendo que al final logró su cometido (obtener suscriptores), creemos que seguramente, estos mensajes le suenan a victoria.
En fin, según él, esto también fue una forma de llamar la atención a las autoridades de YouTube, a quienes ha criticado por la forma en la que tratan a sus creadores de contenido.
Buena jugada PewDiePie, ¡buena jugada!