Sólo las personas que tienen la dicha y bendición de tener un perrito en casa saben lo inteligentes que pueden ser estos amigos de cuatro patas. No sólo cuando se trata de aprender trucos o hábitos para vivir dentro de casa, sino de la manera en la que se las ingenian cuando ellos están en peligro.
Vaya que una vez más esa lección la aprendimos gracias a este perrito callejero que nos ha hecho soltar la lagrimita en redes sociales, pues se ha viralizado un video donde se puede ver al pobre animalito pedir ayuda luego de que se enterrara un clavo la pata.
El perrito tenía un clavo en la pata y entró a pedir ayuda
Se trata de una grabación captada por las cámaras de una veterinaria en el municipio de Juazeiro do Norte, Brasil. En las imágenes se ve a un perrito sin hogar que llega a la clínica en cuestión y aunque al principio parece que sólo busca algo de comer, el perrito se recarga en una de las paredes del consultorio.
Es ahí cuando la veterinaria Dayse Silva se da cuenta de lo que ocurre y se acerca para ayudarlo. De acuerdo con el testimonio de la mujer para el portal Globo, el perrito no sólo tenía el objeto incrustado en una de sus patitas, sino que también presentaba un sangrado en el área de los genitales.
Pero bueno, vean el tierno video a continuación:
Una veterinaria lo ayudó y lo curará para encontrarle un hogar
Dayse Silva también comentó que momentos antes de entrar a la clínica, el perrito estaba acostado abajo de un árbol, por lo que quizá el olor de los otros animales en el lugar fue lo que lo animó a entrar y pedir ayuda.
Afortunadamente la veterinaria le curó su patita, sin embargo, durante la revisión la mujer descubrió que el animalito tiene un tumor venéreo transmisible, por lo que el perrito será sometido a una quimioterapia y estará en observación durante un mes. Luego, Dayse planea encontrarle un hogar a este suave amigo de cuatro patas.
“Estoy muy feliz de poder ayudar. Es una práctica común en mi clínica, si Dios lo permite, le encontrará un muy buen hogar”, mencionó Silva que acostumbra a dejar agua y alimento afuera de su consultorio para animales. ¡Aún hay gente buena en el mundo!