Podrás tener amigos cercanos, bonitas historias de amor, pero ninguno de esos dos se compara al cariño que un perro puede darte y que dura por toda su vida. ¿Como lo sabemos? Por casos como este, en el que una perra regresó a su hogar después de 10 años de haber desaparecido.
Cuando Abby no volvió a su hogar en Apollo, Pennsylvania, hace 10 años, su dueña Debra Suierveld lloró su pérdida. A pesar de tener un microchip, la ubicación de la perra no pudo ser detectada.
Sin embargo, un día Abby apareció en la puerta de George Spiering, quien la llevó a un grupo de protección animal en donde pudieron obtener datos de su chip y así lograron ponerse en contacto con Debra.
“Es como si regresara de entre los muertos”, dijo emocionada la señora Suierveld a un diario local. “Lloramos por ti”.
Para su sorpresa, Abby se encontraba en buenas condiciones de salud, por lo que creen que posiblemente alguien la haya adoptado. “Cuidaron muy bien de ella. Pero como sea que te llamaran, estaban mal” . Cuando se encontró con su dueña, Abby la reconoció y aún respondía a su nombre. :’)