Uno de los temas más importantes de cualquier alimento es su fecha de caducidad. A nadie le gusta comer algo que está a punto de descomponerse, pero viendo la cantidad de químicos que tiene muchos preservadores, como que también el comer algo con mucha vida útil no es muy apetitoso.
Esto no era algo de lo que la gente se preocupara en el pasado, comiendo por lo general cosas frescas… bueno, no es como que les quedara de otra. Es por eso que un hallazgo realizado en la Antártida tiene sorprendidos a todos:
Encontrado por los investigadores del Fondo de Herencia de la Antártida, este pastel de frutas tiene 100 años de existencia:
“Hecho por Huntley & Palmers, aún está envuelto en papel y guardado en una caja de metal. El pastel tal vez date de la expedición Terra Nova (1910-1913) y ha sido documentado que llevaron esta marca de pastel particular. Aunque la caja estaba en mal estado, el pastel se ve y vuele casi comestible.”
Con más de 100 años de estar en una despensa en la tundra de la Antártida, este pastel está en casi condiciones prístinas, viéndose tan apetitoso como cuando fue comprado… bueno, haciendo un lado que es un pastel de frutas.
“Es una comida alta en energía para las condiciones antárticas y sigue siendo el favorito para las expediciones en el hielo.” Estas fueron las palabras de una de las representantes del Fondo de Herencia de la Antártida, para el sitio Boigboing.
Bueno, no creemos que alguien se vaya a comer este pedazo de historia. Y nosotros que creíamos que sólo el Twinkie era inmortal.