Bien lo dice el padre a los novios justo antes de terminar la boda: el matrimonio es hasta que la muerte los separe. Muy pocos casos hay en el mundo de parejas que lo cumplen y justo de eso queremos hablarles hoy, porque son precisamente todos esos lo que nos hacen creer una vez más en el amor y sobre todo, que a pesar de todas las cosas que suelen suceder, siempre se puede salir adelante, así como este par de tiernos abuelitos.
Para que se den una idea, esta maravillosa pareja ya andaba disfrutando de las mieles del amor antes de que la televisión se inventara y entre los dos han vivido 214 años y 360 días hasta el momento de redactar esta nota. Por supuesto que pasar tanto tiempo con la persona que amas es espectacular, pero a la vez también aparecieron un montón de desafíos que afortunadamente pudieron superar, demostrando ser más fuertes que nada.
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La pareja más longeva de la historia
Esta es la historia de Julio César Mora Tapia y Waldramina Maclovia Quinteros Reyes, una feliz parejita originaria de Ecuador de 110 años y 104 años respectivamente, pero se han ganado la atención de todo el mundo porque llevan casados 79 años. Según lo que cuentan, se conocieron en unas vacaciones cuando la mujer fue a visitar a su hermana, que vivía en el mismo edificio del que sería su marido.
Fue gracias a su cuñado, primo de Julio César, que empezaron a platicar. Entre ellos nació una verdadera amistad, pues ambos eran maestros y eventualmente llevó a una relación amorosa, que resultó en el matrimonio de esta pareja siete años más tarde. La ceremonia solamente fue muy íntima y casi secreta, solamente fueron amigos muy cercanos porque las familias de los novios no estaban muy acuerdo con que se casaran.
Formaron una enorme familia que cada vez crece más
Con el tiempo todos los que se oponían a su amor se dieron cuenta de que estaban equivocados. Waldramina y Julio César continuaron trabajando en diferentes escuelas y con el paso del tiempo se convirtieron en padres de cinco hijos –aunque lamentablemente uno de ellos murió a los 58 años–. Fue justo en ese momento cuando ambos probaron su amor y con mucho esfuerzo, paciencia y cariño, lograron salir adelante.
Después de tantos años juntos, lograron que cada uno de sus hijos tuviera una carrera universitaria –titulados y toda la cosa- y después de jubilarse han visto como la familia que ellos formaron creció por completo. Ahora tienen 11 nietos, 21 bisnietos y 9 tataranietos, a los cuales disfrutan como a nada y sin querer, les demuestran que una pareja sí puede durar para toda la vida.
Y a todo esto… ¿cómo le hacen para durar tanto tiempo juntos?
Por supuesto que su historia no podía pasar desapercibida, es por eso que el Libro Guinness de los Récords les dio el título al matrimonio más longevo del mundo. Una de las hijas de Julio César y Waldramina, Ana Cecilia, contó a la página del récord que la pareja disfruta de la compañía del otro, y le gusta ir al cine o al teatro juntos.
También les encanta plantar y cosechar plantas, pero sobre todo compartir los frutos con la familia y los amigos, pues organizan grandes cenas solamente para que todos puedan comer y pasar un rato agradable. Y por supuesto que la feliz pareja nos contó el tip para tener una relación como la suya. Ambos consideran que el amor, la madurez y el respeto son la clave para lograr un matrimonio largo y feliz, en sus propias palabras:
“El respeto, la compasión y la consideración con la que mantenemos nuestra relación fue muy importante; nunca discutimos ni peleamos. Había desacuerdos, pero no eran perceptibles para ninguno de nuestros hijos que también merecían respeto y cariño. El amor y la madurez que tuvimos como pareja desde el principio del matrimonio nos permitió conocernos y crecer emocionalmente para definir nuestro futuro”.
No cabe duda de que esta pareja de abuelitos nos demostraron que el amor sí puede durar toda una vida, que eso no sólo lo vemos en las películas, sino que es completamente real. Eso sí, siempre y cuando respetes, quieras y entiendas a la otra persona, pero sobre todo, esto se consigue y aunque suene muy cursi, cuando estás con la persona correcta.