Con gran orgullo, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) presumió la titulación de Matías Alanís Álvarez, quien en tiempo y forma logró presentar los requisitos necesarios para ahora ostentarse como licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública. Claro, eso muchas personas lo hacen por año. Lo que destaca el logro de Alanís es haber superado los obstáculos de su condición física: padece encefalopatía atetoide (parálisis cerebral), la cual le impide controlar sus movimientos; además de una elevada miopía.
Sin embargo, nada fue impedimento para que el buen Matías presentara su respectivo examen de admisión, ingresara a la UNAM y cubriera –por el sistema de Universidad a Distancia– en tiempo récord el total de créditos. Todo desde su casa, en Guadalajara, Jalisco, y gracias al programa de inclusión académica para alumnos especiales que emprende la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. Se instalaron softwares en la computadora y en la silla de ruedas de Matías: el Jaws, con el que se convierte la imagen a texto, y el Open Book, con el que el texto se lee y, así, se permite escuchar el contenido.
Además de concluir satisfactoriamente la licenciatura, Matías pudo superar el gran “coco” de muchos: hacer la tesis. El destacado estudiante, con la ayuda de su madre, escribió y defendió el trabajo Los mecanismos de preservación del sistema político mexicano, el cual le valió la merecida mención honorífica.
En entrevista, Matías explicó que eligió ser politólogo porque desde pequeño le llamaron la atención los asuntos de la vida pública. La tesis con la que consiguió su titulación plantea que en el marco jurídico mexicano se deben incluir más normas que garanticen la libertad de expresión absoluta. ¿Y ahora qué sigue para este ejemplar estudiante? Matías, de 27 años, planea realizar una maestría y espera en un futuro próximo ser profesor a distancia de la carrera que él mismo estudió.
En la ceremonia por el 45 aniversario del sistema de educación abierta y a distancia de la UNAM (SUAyED) estuvo presente el rector de la máxima casa de estudios, Enrique Graue, quien aseguró que Matías –y gente con su condición– siempre serán bienvenidas en la Universidad. “Me dijo que ésta era mi casa y me felicitó por mi nivel académico”, comentó el emocionado Matías.