Sin duda, en el internet de las cosas nos encontramos historias que nos levantan el ánimo o hasta nos conmueven a tal punto de que logran sacarnos una que otra lágrima. Por acá les hemos contado algunos casos increíbles de pequeños que se enfrentan a la adversidad con una buena cara, pero en esta ocasión les haremos el día contándoles sobre unos niños con cáncer que cumplieron el más grande sueño que tienen a su corta edad: convertirse en policías. Y sí, preparen los pañuelos porque los necesitarán.
Resulta que Cristo, Alan y Christian son unos pequeños que padecen cáncer y actualmente están en tratamiento en el Hospital Infantil de Tamaulipas. A pesar de que no se conocían, estos tres chicos comparten una meta en común: quieren ayudar a la gente y convertirse en agentes cuando sean grandes. Sin embargo, y para que se vayan preparando para cumplir con el deber y sepan muy bien cómo está el trabajo, el director del hospital los apoyó para que alcanzaran una meta.
Estos tres niños cumplieron su sueño
De acuerdo con Milenio, a través de una asociación civil Voluntad contra el Cáncer y en conjunto con el hospital ubicado en Ciudad Victoria, lograron contactar a la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas para contarles sobre estos niños. Por supuesto que sin dudarlo, los elementos de la fiscalía del estado decidieron visitar a los pequeños y les cumplieron el sueño de convertirse en policías por un día. Y por supuesto que hay imágenes de este momentazo que los conmoverá.
Para que se den una idea de cómo estuvo la cosa, el personal de la FGJ llevó uniformes parecidos a los que ellos usan para vestir de policías a Alan, Christian y Cristo. Por si esto no fuera suficiente, también los llevaron en sus unidades oficiales hasta las instalaciones de la Fiscalía para darles un recorrido y un breve entrenamiento. Pero la cereza del pastel fue que esta visita terminó con un emotivo evento donde nombraron policías honorarios y agentes de investigación a estos pequeñitos.
Cristo, Alan y Christian ahora son policías honorarios
Sobre la historia de estos niños, la directora de Vinculación y Enlace de la FGJ, Asis Sifuentes Fuentes los reconoció y les dijo que son unos guerreros, verdaderos superhéroes pequeños pero grandes de corazón: “Tienen como capa la resistencia y por superpoder su fortaleza niños valientes y fuertes que en conjunto con sus familias y doctores combaten la batalla contra esta enfermedad”. Y la verdad es que estamos de acuerdo, son lo que hace falta dentro de la policía.
Sin embargo, los elementos de la fiscalía también le dieron un aplauso a los papás de Alan, Cristo y Christian por ser invencibles, por luchar junto a ellos y nunca dejarlos caer. Ya para terminar, el vicefiscal ministerial, Enrique Feregrino Taboada, señaló que desde ahora los tres pequeños son parte de la institución y las oficinas siempre serán su casa. No cabe duda de que el internet de las cosas nos regala casos increíbles, pero el de estos niños seguramente les hará el día.
