Que lance la primera piedra aquel que nunca haya llegado tarde a la escuela. Ya fueras en el turno de la mañana o en el de la tarde, el llegar a tiempo a clases siempre era un dilema, sobre todo cuando éramos niños.
Y es que aunque nuestros papás hacían hasta lo imposible con tal de que llegáramos a la escuela antes de que cerraran la reja –incluidas cosas como ir desayunando en el transporte público o ver a tu jefecita manejando como el mismísimo Toreto–, había ocasiones en las que simplemente no lográbamos el cometido de llegar antes de las 7 de la mañana, por lo que no nos quedaba más que regresar a casa acompañados de nuestros padres, cambiarnos la pijama y estar todo el día viendo caricaturas en la tele (algo que la neta era más un premio que un castigo pero que aún así teníamos que fingir dolor para no vernos tan cínicos).
Obviamente de estos casos hay muchos, de todo tipo y le suceden a cualquiera. Sino nomás’ pregúntenle a este niño de dos años que, al no llegar a tiempo a la escuela, fue sacado a la calle por uno de los encargados del kinder en el que estudia (o estudiaba). ¿Cuál fue el problema en todo esto?, que cuando eso sucedió su papá ya se había ido del lugar, por lo que el morrito se quedó solo en los peligros de la calle. Mega chale.
Aunque sabemos que esto pudo ocurrir en la siempre sorprendente CDMX, la verdad es que el hecho se dio en Bogotá, Colombia. Los videos de las cámaras de vigilancia del kinder –los cuales fueron difundidos por una televisora local– muestran el momento en el que el papá (llamado Daniel Salazar) llega a la escuela y deja a su hijo con sus compañeritos, quienes juntos caminan a la entrada del kinder, por lo que su papá se confía de que ya está adentro y se va.
Lo malo es que en la entrada, un hombre le prohibe el paso al niño y a otros de sus compañeritos. Varios niños no ven de otra y se van con sus papás, sin embargo, el pequeño protagonista de esta historia no puede hacerlo porque su papá ya no estaba ahí, por lo que se queda en la calle desprotegido y sin nada que hacer, al menos hasta que una señora vecina del lugar pasa y se da cuenta de la situación, por lo que le brinda ayuda.
De acuerdo con el testimonio de la señora dentro de la mochila del pequeño venía la información de contacto de su familia, así que llamó a sus padres para avisarles que su hijo andaba rondando en la calle. Luego de eso, el señor Salazar llegó a la escuela para recoger al pequeño y de paso, pedirle a la escuela que le explicara por qué dejaron solo a un niño de dos años en la calle y no les notificaron que no había podido entrar a sus clases.
Naturalmente la mamá del niño, la señora Liliana Mora, también se le fue encima a los directivos del plantel, pues no midieron el riesgo que pudo haber sufrido su pequeño: “Tenemos un porcentaje muy grande de niños muertos, violados, desaparecidos. La indignación es que mi hijo pudo aparecer en esta estadística. No hay nada que les dé derecho a dejar un niño en total desprotección”, mencionó según los diarios locales.