“Conservo su fotografía conmigo para asegurarme de que está muerto. Lo detesto. Amaba a Hitlier más de lo que amó a su familia.”
Hans Frank era el padre de Niklas, quien fue abogado de Adolf Hitler y el cual se convirtió en Gobernador General Nazi ocupando Polonia, para la supervisión de “La Solución Final” que constaba del exterminio de los judíos en Europa.
Además de hacer a Hitler padrino de Niklas, se creía que Hans era homosexual secretamente y que de hecho, estaba enamorado de su Fürer. Incluso hubo una ocasión en que intentó divorciarse de su esposa, la cual rogó a Adolf que interviniera. Este así lo hizo y “El Carnicero de Polonia” accedió inmediatamente a conservar su matrimonio para complacer a su líder.
“Puedo decir que mi padre era homosexual en secreto. Tengo cartas que recibió de dos profesores en Munich que eran más que amigables.”
Aunque Niklas jamás vio directamente ningún acto de violencia, pudo ver la obra de su padre en los periódicos, donde mostraban fotografías de montañas de cadáveres.
Hans Frank fue sentenciado a muerte junto con otros 12 Nazis en 1946; y este le pidió a su hijo como última voluntad que resaca por él. Pero jamás cumplió ese último deseo.
Ahora, el ya mayor Niklas Frank siente la carga del legado que ha dejado su padre y esto ha causado interminables argumentos con sus hermanas. Por ese motivo siempre carga una foto de su padre, como un recordatorio de que “el monstruo ya no está con vida”.
Vía mirror
