Si existe un personaje que pueda representar enteramente la palabra ternura, es sin duda Mamá Coco. Esa dulce viejecita ejemplifica de maravilla la figura de la madre, abuelita y bisabuela mexicana en la película de Disney que nos cautivó hace unos años, y en Michoacán vivía la mujer en quien se inspiró ese personaje.
Murió María Salud Ramírez, ‘Mamá Coco’ de la vida real
Oh sí, allá en Michoacán vivía Mamá Coco de la vida real. Se trata de María Salud Ramírez Caballero, quien vivía en la comunidad de Santa Fé de la Laguna. Tiene su propia página de Facebook, donde se suelen compartir fotos muy hermosas de ella, y donde se informó este 16 de octubre sobre su muerte.
Y fue precisamente en dicha página donde se compartió una foto lindísima en la que vemos a la mujer junto a su pastel de cumpleaños, pastel donde se observa al personaje de la cinta de Disney. “Gracias a Dios hoy cumplió otro año mas de vida”, decía la publicación de su cumpleaños 108.
El día que celebró su cumpleaños con un pastel del personaje
En la foto vimos a Mamá Coco real junto a su pastel por su cumpleaños 108, y reaulta inevitable no escuchar de fondo en nuestros corazones ‘Recuérdame’, así como cuando Miguel se la cantó a su bisabuela en la película que le hace un merecidísimo homenaje a nuestra tradición del Día de Muertos.
La verdadera Mamá Coco ya era muy popular en su comunidad desde antes de que se estrenara la cinta de Disney en el 2017. Pero naturalmente se volvió aún más famosa tras “aparecer” en la película. Según cuenta Milenio, recibía visitas de mucha gente tanto de su comunidad como turistas.
‘Coco’ se convirtió en su momento en una de las películas más taquilleras en México y ha inspirado diferentes gestos hermosos en nuestro país. Un panteón allá en Guanajuato, por ejemplo, fue adornado con murales de la película. Otra historia maravillosa ocurrió cuando un niño le llevó una serenata a su bisabuela, y tal como en la cinta, le cantó ‘Recuérdame’.
La publicación donde Mamá Coco celebró su cumpleaños número 108 recibió mucho amor en los comentarios, porque ¿apoco no?, es imposible no sentir una tremenda ternura al ver a tan dulce abuelita feliz con su pastel.
¡La vamos a extrañar, Mamá Coco!
