Por andar haciendo cosas buenas que un “agraviado” dueño de marranitos vio como malas, una activista en pro de los derechos de los animales podría pasar una buena temporada en prisión. Así es cómo estuvo el asunto:
Todo ocurrió una calurosa tarde de verano, cuando Anita Krajnc, de 48 años, vio que unos puercos que iban en un camión sudaban la gota gorda… y no precisamente por ir al matadero (que sí iban), sino por la sofocante situación en la que se imaginó se encontraban.
Así que compadeciéndose de los familiares de Porky, Anita procedió a darle agua a los sedientos puerquitos, esto pese a que el responsable de los animales, el transportista, le pidió dejar de hacerlo. “Jesús dice: da agua a los que tienen sed”, dice la activista… “¿Sabes una cosa?, estos no son seres humanos, tonta”, respondió Jeffery Veldjesgraaf, quien bajó de su vehículo para enfrentar a la samaritana.
Aquí el video.
En fin, como vio que no tenía muchas ganas de dejar en paz a sus animales que, según él, son tratados éticamente y de acuerdo a las normas establecidas, el transportista llamó a la policía… y todo acabó en una acusación por conducta criminal contra Anita (por cierto, fundadora del grupo Toronto Pig Save).
De acuerdo con una entrevista que Veldjesgraaf ofreció a The Guardian, la razón de la denuncia es porque no estaba seguro de qué era lo que había en las botellas, así que temió por la seguridad de los animalitos. Aunque la mujer aseguró que se trataba de sólo agua, el chofer pregunta “¿Cómo puedo saberlo?”.
Además, Veldjesgraaf comentó que también se preocupó por la seguridad de los manifestantes, ya que a veces se agolpan cerca de los vehículos de transporte –como el suyo– cuando el tráfico se detiene. “No tengo nada contra los activistas”, aseguró…
“Es un país libre. Son sus puntos de vista –con los que no concuerdo- pero tienen derecho a su opinión, así como nosotros tenemos derecho al nuestro”.
Por su parte, varias peticiones por internet ya han sido creadas para intentar que Anita no sea enjuiciada. Por ejemplo: Compassion isn’t a crime, la cual ya lleva más de 127 mil firmas y otra en change.org que ya cuenta con poco más de 25 mil.
¿Opiniones?