El día de la boda debe ser uno de los momentos más memorables y hermosos para esas parejas que quieren unir sus vidas para siempre. Lo más común es imaginar un servicio en una iglesia, pero no tiene que se siempre así. Algunos novios y novias optan por romper la tradición dispuestos a consagrar sus votos matrimoniales en cualquier lugar.
Así le sucedió a una chica en Las Vegas luego de que no quiso posponer más el momento de su boda. Ella decidió que no era necesario una ceremonia ostentosa y con tantos invitados, así que acudió al centro comercial donde trabaja su pareja con todo el ánimo de casarse ahí mismo.
La novia llega con todo y sacerdote preparado
En los últimos días se hizo viral un video en el que se aprecia a una mujer vestida de novia rondando por los pasillos de una sucursal de la tienda Target en la conocida “Ciudad del Pecado”. Esta mujer tenía todo bien claro: buscar a su novio que se encontraba trabajando ahí para casarse de una vez por todas.
Luego de deambular por varias zonas de la tienda, la novia -acompañada por su dama de honor y hasta un sacerdote para oficiar la ceremonia- encontró a su prometido, quien andaba muy tranquilo acomodando una mercancía. Entonces ella llegó e impuso condiciones reclamándole que debían casarse en ese momento o todo terminaba.
“Me pusiste este anillo hace dos años y es momento de hacerlo o escapar”, le dice la decidida novia a su pareja. Por supuesto, la chica sabía la decisión estaba en el aire para su enamorado a quien después le dijo certeramente que si no se casaban en ese mismo segundo, acabaría todo y se iría de ahí para no volver nunca más.
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Desenlace misterioso
Un momento así no podía pasar desapercibido para los compradores de la tienda, quienes se mantenían expectantes a la inusual ceremonia improvisada. La novia se dio cuenta de eso y se dirigió al público diciendo “solo estoy haciendo que se comprometa ahora o terminamos”. Incluso se alcanza a escuchar en el video a una persona apoyando a la enamorada.
Luego del rato en aquel pasillo, ambos llevan su platica, al sacerdote y a la dama de honor afuera de la tienda para seguir discutiendo. El novio desencajado y aparentemente nervioso pasa a lado de la cámara diciendo “¿podría haberme alguien dicho antes?”.
Desafortunadamente se desconoce el desenlace de la historia, si se casaron o si la relación terminó. Incluso algunas personas estiman en redes que podría haberse tratado de una broma de la mujer a su pareja. Lo que queda claro una vez más es que el amor nos hace cometer toda clase de locuras.
