Lo que hay que ver en pleno Siglo XXI, neta… Una mujer se volvió viral por las peores razones posibles. Échale nomás, llamó al 911 para “denunciar” a una pareja gay ¡¡por abrazarse en una iglesia!!
Fue a través de TikTok donde se dio a conocer el video de la mujer discriminando de una forma bien surrealista a dos jóvenes que estaban abrazándose a las afueras de un templo.
Les echó agua bendita y los ‘acusó’ con el 911
En la grabación, compartida por el usuario leoperovirgo, vemos primero a la mujer rociarles algo (aparentemente agua bendita) mientras dice “protégenos y con tu espada defiéndenos” (¡Woooooow! Irreal, neta).
Tras ello amenaza a la pareja con llamar al 911, a lo que ellos le contestan que no están haciendo nada malo, que malo es odiar, como claramente ella hace. Alguien más presente en la escena, quien defiende a los dos jóvenes, señala a la mujer que no están haciendo nada indebido como robar o algo más.
Hasta el operador del 911 le dijo que eso era discriminación, pero ni así entendió
Pero hablamos de una mente muuuuuy cerrada, así que sí, la mujer llamó al 911. Le dice al operador que sólo quiere que se vayan “a abrazar al hotel o a la calle” pues “con tanto jardín que ya hizo el gobernador, y quieren estar aquí adentro de la casa de Dios“.
Para colmo, la mujer utilizó argumentos del milenio pasado. A pesar de que el operador le dice que sus acciones son discriminatorias, ella asegura que la casa del señor es un lugar sacro y los actos de la pareja van contra el sexto mandamiento.
“¿Entonces ellos sí pueden entrar aquí a hacer sus actos inmorales? Si no se ha aprobado la ley, yo soy de Provida y no se ha aprobado. Hemos estado luchando contra eso. Esto es de Satanás. El sexto mandamiento, la fornicación. Aún no se ha aprobado la ley para que sean libres de hacer actos sucios aquí en el templo“ (hay que oír para creer, ¡insólito!).
También nos resultó xenófoba
Y bueno, por si discriminar a la pareja y llamar al 911 sin tener una emergencia real no fuera suficiente para esta mujer, también incurrió en xenofobia. Dijo que quizá los jóvenes ni eran mexicanos, que a lo mejor eran migrantes.
“Vienen de otros países depravados a enseñar inmoralidad a la juventud de aquí”.
Al final los jóvenes hablaron con el operador que atendió a la mujer, quien les dice que efectivamente se trata de un acto de discrimianción contra ellos, pero para evitar una confrontación física, lo mejor era irse. La pareja acepta diciendo que sí, en alguien debía caber la prudencia y evidentemene no sería en la mujer.
Terrible ver esto en pleno 2023.