¿Alguna vez han visto cómo hacen las abejas asiáticas para defenderse de las avispas? Si no es así, entonces todo esto será nuevo para ustedes. Estas pequeñas criaturas no sólo son bastante metódicas a la hora de crear sus colmenas, ya que también son capaces de usar mecanismos complejos para protegerlas.
Este fascinante movimiento es característico de las Apis Dorsata, conocida también como la abeja asiática grande. Cuando perciben una amenaza, estas pequeñas guerreras empujan su abdomen hasta 90 grados y lo agitan junto con sus alas, de modo que se produce un sonido bastante peculiar que confunde y hasta aturde a las avispas.
Ahora, si se preguntan por qué hacen esto en vez de atacar al depredador con picaduras, la respuesta es simple: las pobres abejitas no podrían ganar una batalla cuerpo a cuerpo. Como varios de sus enemigos, las avispas son más grandes y poderosas, así que deben utilizar un sistema que produzca la menor cantidad de bajas y heridos.
Las ondas producidas por el movimiento de las abejas ayudan a confundir a los depredadores, de modo que les parezca imposible enfocar a una sola presa y mucho menos capturarla. Ya ni hablar de hacer ataques masivos para matar, obtener larvas o alimento que se encuentre dentro de su colmena.
La naturaleza puede ser brutal en algunas ocasiones, pero dentro de todo ese caos también hay belleza. Por eso es que quisimos compartir con ustedes este breve clip. ¡Es realmente fascinante!