Para algunos, el matrimonio es como traer una bola con cadena atada al pie. Sí, este sentimiento es muy pesimista y de pensar así, tal vez eso del matrimonio no sea lo tuyo.
Sin embargo, muchas parejas que parecieran estar felizmente casadas, se sienten atrapadas en su matrimonio. Sin embargo, al final del día el confort de lo rutinario les gana.
A menos que seas como Lawrence Ripple, hombre de 70 años que reside en la Ciudad de Kansas y que prefirió la cárcel a regresar a casa con su esposa.
Según un reporte del FBI, Ripple apareció en un banco de la ciudad en donde le pasaría la típica nota de “traigo un arma, dame el dinero”, al cajero. Pero en vez de echarse a correr como lo haría cualquier truhán, Ripple se sentó cómodamente en el sillón de espera del lugar, esperando por el guardia quien lo llevó con las autoridades pertinentes.
Ya en la corte, el extraño hombre dio su razón para haber cometido el crimen. Argumentó que prefería ir a la cárcel que tener que volver a discutir con su esposa.
Incluso, este fino caballero escribió una carta enfrente de su alterada “esposa” en donde le decía que prefería estar tras las rejas que seguir con ella.
¿Y qué no era mejor ir con la Srta. Laura para resolver esto?
Todavía no se ha dado ningún veredicto pero de ser encontrado culpable, Ripple podría pagar una sentencia de hasta 20 años en prisión.
Claro, si realmente lo quieren castigar deberían de regresarlo a casa con su mujer, quien después de semejante altercado debería de estar aún más loca que él para continuar con tal disfuncional matrimonio. Vaya embrollo, hasta parece que esto salió directamente de un episodio de “Married with Children”
