Y en la sección “pin$#es rusos locos”.
Después de adquirir un producto de segunda mano, lo primero que se hace es calarlo… a ver si no nos timaron. Es lo que pasa con este par de chavos, que al tener en sus manos un supuesto casco K6-3 –de los que usan las fuerzas especiales de su país- quieren comprobar si en realidad está hecho de titanio puro… Para ello, deciden echarle unos balazos.
Y para verificar si aparte de aguantar las detonaciones, es ergonómicamente adecuado… pues uno de los paisanos de Putin dispara contra su compañero con el casco puesto. Chequen el resultado.
¿Y si no hubiera tenido buena puntería?