¿Estás solterito y nadie te pela? ¿Eres bien chambeador y buena onda pero el amor no te ha sonreído? ¿Estás leyendo esta nota con voz de comercial? Entonces esto es para ti. Y es que hoy en “Cosas que parecen broma pero no lo son”, en Tailandia un adinerado propietario de granjas ha lanzado una interesante convocatoria en redes sociales, en las que básicamente está buscando un buen partido para su hija, de 26 años de edad, y ofrece una jugosa cantidad de 6 millones de pesos y todos sus negocios a quien se anime a casarse con ella. ¡Qué ofertón!
Si ya te desanimaste porque es hasta Tailandia y piensas que sólo se tomarán en cuenta a los prospectos de por allá, no te desanimes, pues este don llamado Arnon Rodthong, de 58 años, ya dijo que no le importa de dónde vengan los interesados siempre y cuando tengan la disposición de trabajar muy duro para seguir con el legado de sus negocios y también, tener el deseo de hacer feliz a su hija, quien hasta el momento sigue soltera. Si eso no fuera poco, asegura que su pequeño capullo aún es virgen y que no tiene problemas con seguir así hasta llegar al altar.
Claro que esto puede sonar a que es una trampa y que su hija no quiere casarse, sin embargo y según el Daily Mail, la joven ya está enterada de todo y se le hace muy divertido que su papá haga esto. Claro que también quiere aprovechar la situación y piensa realizarse una cirugía estética cuando su futuro esposo logre que el señor Arnon le herede prácticamente todo lo que tiene, aunque no por eso se va a casar con el primero que se le ponga enfrente: “Si tengo que casarme con alguien, solo quiero que sea una persona diligente y buena que ama a su familia”, dijo la chica de 28 años.
Si después de leer todo esto crees que puedes ser ese yerno especial para don Arnon Rodthong, mejor córrele a tramitar tu pasaporte y tu visa, porque seguro habrá muchas solicitudes en puerta. Eso sí, los gastos del pasaje y hospedaje corren por tu cuenta, aunque encontrar el amor y que además te paguen por ello no suena tan mal ¿o sí? *Todos diciéndole “no eres tú, soy yo” a sus novias en 3…2…1…*