En el internet de las cosas siempre encontramos toda clase de historias, buenas y malas. Aunque de repente aparecen algunas que nos hacen enojar y encabritarnos a más no poder, porque lamentablemente hay un montón de pasados de lanza en este mundo. Sin embargo, lo que estamos por contarles podría entrar en la categoría de la peor gandallada del año, pues un hombre se gastó el dinero de donaciones para combatir el COVID en darse lujos.
Aunque no lo crean, hay gente que en medio de la tragedia y a pesar de que el planeta se encuentra en una situación sumamente complicada, hay quienes buscan pasarse de listos. Tal es el caso de Valesky Barosy, un sujeto de 27 años originario de Miami, Florida que en lugar de utilizar el dinero que le prestaron como apoyo para empresarios afectados por el COVID-19 para lo que era, se compró ropa de diseñador y hasta un coche deportivo.
Este hombre se gastó el dinero que le prestaron en puros lujos
Resulta que hace unos días se hizo viral la historia de este hombre, pues se presentó ante una corte de Florida el pasado 29 de diciembre donde se le acusa de varios cargos de fraude. Para que se den una idea de cómo estuvo la cosa, a este tipo lo incriminan por gastar un préstamo del Programa de Protección de Nóminas (PPP por sus siglas en inglés) en prendas de firmas de lujo como Gucci, Louis Vuitton o Channel, relojes Rolex y un Lamborghini.
De acuerdo con medios locales, Barosy enfrenta cinco cargos de fraude electrónico, tres de lavado de dinero y uno más por robo de identidad agravado. Por si esto no fuera suficiente, el acusado presentó solicitudes de préstamo falsas en su nombre y en el de sus cómplices, en las que solicitaba más de 4.2 millones de dólares, los cuales están destinados a ayudar a empresarios afectados por la pandemia y que por supuesto, le aprobaron para apoyarlo.
De acuerdo con las acusaciones, el hombre y sus cómplices recibieron alrededor de 2.1 millones de dólares en préstamos federales, los cuales usó para comprarse el Lamborghini Huracán EVO, relojes Rolex y Hublot y ropa de diseñador de Louis Vuitton, Gucci y Chanel. De ser declarado culpable –que es lo más obvio–, Valesky Barosy enfrentaría una condena de 132 años de prisión. Ni modo, eso para por andar de gandalla, ¿no creen?
