Todos saben que lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas, aunque la aventura de este joven solamente lo condujo a la cárcel. Un hombre con complejo de Ícaro, logró burlar los retenes de seguridad del aeropuerto de McCarran, corrió por toda la pista, de un salto consiguió trepar hasta el ala de un avión de Alaska Airlines, el cual se encontraba en movimiento, justo a punto de despegar. Pero, afortunadamente no pasó a mayores.
Desde luego, el susto fue para el piloto del vuelo 1367, quien maniobraba la aeronave hacia la pista de despegue. A falta de espejos retrovisores, de pura casualidad logró percatarse que una persona hacía malabares para poder sentarse al filo del ala del Boeing 737, por lo que no tardó en notificar a la torre de control.
Por suerte para el acróbata, el avión logró frenar justo a tiempo antes de despegar, solo para que los oficiales de policía, llegaran al lugar para arremeter contra el hombre y convencerlo de que bajara de la aeronave de la misma forma en la que se subió.
En qué rayos estaba pensando
De acuerdo con CNN, los hechos ocurrieron el pasado 12 de diciembre, alrededor de la una de la tarde, dando tiempo suficiente para que la historia se hiciera viral. Claro, a todos les causó un poco de gracia, excepto al personal de Alaska Airlines, pues la aerolínea tuvo que retrasar el vuelo por un periodo de más de cuatro horas para inspeccionar a fondo el avión, asegurándose de que el inoportuno huésped no hubiese colocado algún artefacto en el ala del avión.
Todo por una selfie
Mientras tanto, el intrépido hombre, cuya identidad quedó en anonimato por obvias razones, se encuentra todavía en la estación de policía dando cuenta de lo que planeaba al treparse al avión. Afortunadamente uno de los viajeros que se encontraba en el aeropuerto y consiguió grabar toda la escena donde se aprecia a un sujeto caminando sobre el ala del avión para luego sentarse y quitarse los calcetines y los zapatos, justo cuando los policías se acercaron al hombre.
Aunque todavía se desconocen las causas que lo animaron a treparse al ala del avión arriesgando su vida, la seguridad de los pasajeros y de todo el aeropuerto de Las Vegas. Pero, todo parece indicar que toda la peripecia fue para lograr una selfie. La recomendación, ooooobvio, es que no intenten hacer esto.