Existen algunas marcas que superan su naturaleza comercial y se transforman en íconos de nuestra identidad. Tal es el caso de la Salsa Valentina, esa compañera leal de los mexicanos capaz de mejorar el sabor de todas comidas habidas y por haber.
Si nacimos o vivimos en México entonces es seguro que todos la hemos comido, pero pocos saben cómo fue que nació el nombre de la Salsa Valentina, ese asombroso complemento de tapa amarilla y líquido anaranjado.
La historia de la Salsa Valentina casi tan asombrosa como su receta, por eso vale la pena conocerla. En particular, el relato de cómo esta salsa, originaria de Jalisco, consiguió su famoso nombre y se hizo popular en todo el país.
La historia de la Salsa Valentina
La salsa Valentina nació durante los años 60, en un pintoresco municipio de Jalisco de Tamazula de Gordanio, nombre que puede traducirse como “el lugar de los sapos” (por eso muchos llaman a la Salsa Valentina como Salsa Tamazula).
Lo que hace único a dicho sitio son sus famosas salsas. Durante un tiempo se hacían tantas, que los pobladores competían haber quién hacía la mejor. ¡Con razón de ahí salió la Salsa Valentina!
Entre los participantes más destacados estaban Gilberto Reyna, que se había hecho famoso por haber inventado la salsa El Torito, y Manuel Maciel Méndez el padre de la llamada y hoy famosa Salsa Valentina.
Don Manuel, como lo conocía la gente, era reconocido por vender paletas de hielo. No obstante, en 1960 hizo un nuevo emprendimiento relacionado con la receta familiar de una salsa cuya característica principal era su picor de dos grados.
La Salsa Valentina originalmente se llamaba Tamazula
En un inicio se llamaba “La salsa Tamazula” en honor al pueblo dónde nació y tenía un etiquetado amarillo. Poco a poco, “la Tamazula” (con su icónica etiqueta amarilla) consiguió un gran número de fanáticos y comenzó a exportarse a otros lugares de Jalisco.
Después la Salsa Valentina comenzó a llegar a toda la República Mexicana, a Estados Unidos y a Europa. Hay que destacar que al inicio se usaba esencialmente para los mariscos.
¿Quién era Valentina Ramírez y qué tiene que ver con el nombre de la Salsa Valentina?
Cuando la salsa de Maciel Méndez se popularizó, decidió cambiarle de nombre. La bautizó en honor a Valentina Ramírez Avitia una heroína que participó en varios de los conflictos armados que se suscitaron durante la Revolución Mexicana.
La historia de esta mujer en sí misma una joya, ya que Valentina no se parecía a nadie. En las pocas imágenes que tenemos de ella se la ve con mirada hosca, enfundada en un traje de hombre, sombrero parecido a Zapata y no una, sino dos armas.
Valentina Ramírez participó en la Revolución Mexicana
La llamaban la leona nortal y nació en Tamazula en 1893. Fue hija de una familia extraña, en la que el padre leía todos los días el periódico y tenía un sueño que no pudo hacer realidad gracias a muerte prematura: participar en la Revolución.
Valentina heredó el ímpetu de su progenitor, y con sólo 17 años se enlistó en el ejército maderista con el nombre de Juan Ramírez. Para lograr esta hazaña, Valentina imitó los movimientos masculinos de sus hermanos, cortó sus trenzas, modificó su voz y se fue en caballo con los revolucionarios.
Valentina era tan aguerrida, que muy pronto la nombraron teniente, pero murió en Sinaloa en 1979 sin saber que años después su nombre sería famoso gracias a la Salsa Valentina. ¿Conocían el origen del nombre de nuestra salsa favorita?