Mientras que los políticos se llenan la boca de palabras grandilocuentes y promesas vacías, el mundo se encuentra en un estado muy preocupante.
Pobreza, hambre y por supuesto, guerra, la cual es la responsable de muchas de las penurias que sufre gran parte de la población mundial todos los días. Imágenes de destrucción y caos son las que vemos en todos los periódicos y noticias, las cuales hacen que perdamos la fe en la humanidad poco a poco.
Es por eso que el fotógrafo palestino, Emad Nassar, se ha dedicado a capturar lo mejor del espíritu humano en tiempos de guerra. Enfocándose principalmente en los niños y su indomable fuerza, aún con una guerra encima:
A pesar de la destrucción que se abre a su paso, los niños de regiones del medio oriente siguen encontrando la forma de maravillarse y de divertirse, aún en la decadentes ruinas de ciudades asoladas por la guerra.
Esto le ha ganado una inmensa popularidad al buen Emad, quien nos enseña que aún ante la adversidad, hay forma de encontrar momentos de felicidad y de que dejarse caer, no es la opción.