Hay un dicho muy popular que dice “La basura de uno es el tesoro de otros”. Una frase que muchos utilizan para mandarle indirectas a su ex cuando ya es feliz con otra persona, pero que en esta ocasión tomará un sentido totalmente válido gracias al automóvil eléctrico del que hablaremos, el cual fue creado únicamente con restos de basura.
Se trata de Luca, un pequeño automóvil eléctrico creado por los estudiantes de la Universidad Tecnológica de Eindhoven, en Países Bajos, y que realmente está comprometido con el reciclaje y disminución de desechos en los océanos y mares, pues está elaborado con basura que se extrae directamente de ahí.
¡Todo en el automóvil está hecho de basura!
De acuerdo con el portal The Next Web, la carrocería y el chasis de este automóvil fue hecha de fibras de lino combinadas con varios plásticos como botellas de PET y polímeros ABS reciclados. En cuanto al acabado amarillo del auto, se trata de una envoltura en un material reciclado que lo hace lucir de ese color.
Lo mismo ocurre con los vidrio del vehículo, mismos que tienen un tinte oscuro natural debido a los materiales reciclados. En el caso de los asientos, los estudiantes utilizaron cáscara de coco y pelo de de caballo, que posteriormente envolvieron en PET reciclado. ¡Toda una genialidad del reciclaje!
Fue creado en año y medio por estudiantes que buscan concientizar sobre el reciclaje
Si eso no fuera suficiente, Luca cuenta con dos motores eléctricos que lo ayudan a alcanzar una velocidad máxima de 90 km por hora y conseguir un alcance de 220 km (136 millas). Lo que en otras palabras significa que este automóvil eléctrico –que pesa 420 kg con todo y las baterías– aguanta 180 kilómetros por litro de gasolina.
Luca fue desarrollado en un lapso de 18 meses por 22 estudiantes universitarios que, además de ayudar a reducir el número de desperdicios en el mar, también buscan ver a Luca en las calles de Países Bajos en un futuro cercano y demostrar que cosas buenas pueden salir del reciclaje.
“Con este automóvil, queremos demostrar que los desechos son un material valioso, incluso en aplicaciones complejas como un automóvil”, dijo el miembro del equipo Matthijs van Wijk a dicho portal. ¿Qué les parece?