Ok, suspendemos las prensas para reportarles una noticia tan importante como estúpida: un dude rompió una invaluable estatua del siglo XIX tratando de tomarse una selfie. Malditos junkies de las selfies…
Este tipo se sentó en la rodilla de una estatua llamada el Sátiro Ebrio, en la Academia de Bellas Artes de Brera, en Milán, Italia. La estatua representa(ba) a un seguidor de Dionisos, dios griego del vino y lo terrenal, en pleno éxtasis etílico. Ahora, no obstante, la estatua ha perdido el suelo, pues el vándalo, al sentarse en sus piernas, rompió una de ellas.
Esta escultura decimonónica, es una copia de una estatua griega que data del 220 a.C., cuya versión original está sana y salva en Munich, Alemania. La copia, ahora rota, se encuentra en un pasillo de la academia que lleva a una sala que contiene esculturas de la época.
Encuentre las 10 diferencias
El absurdo del destino quiso que ninguna cámara de seguridad captara el momento en que la estatua se venía abajo. Sin embargo, múltiples testigos afirman que se trataba de un estudiante, posiblemente extranjero, que se trepó a la rodilla del ebrio inmóvil para sacarse una selfie.
Señoras dicharacheras juzgando moralmente la desnudez de la estatua para luego darse cuenta de que carece de una pierna.
Chale, rompiendo arte helénico pa’l face.
Por cierto, ya que están esas, estaría cool que le pasaran la escultura a Cecilia Giménez Zueco, esa doña española que restauró el Ecce Homo de Borja, ¿no? Podría agregar una pierna de Marilyn Monroe o algo así. En fin, es solo una idea.
Vía: Daily Mail