La pandemia del coronavirus trajo a nuestras vidas un montón de incertidumbre y lamentablemente, también se ha llevado a millones de personas. Sin embargo, alrededor de la crisis sanitaria han sucedido historias que nos levantan el ánimo y por qué no, también logran sacarnos una que otra lágrima, como lo que estamos a punto de contarles pues unos abuelitos lograron tener un momento romántico a pesar de estar hospitalizados.
Resulta que en el HSHS St. Elizabeth’s Hospital, ubicado en la ciudad O’Fallon en Illinois, Estados Unidos, las enfermeras Hannah Schlemer y Kim Presson decidieron hacer algo especial para una pareja de adultos mayores. Se trata de Frank Martinez, un veterano de guerra de 93 años, y su esposa Mansako ‘Terry’ Martinez, de 86 años quienes a pesar de estar internados en el mismo hospital, se encuentran en diferentes áreas.
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Las enfermeras tuvieron un gran gesto con estos abuelitos
Es por eso que al darse cuenta de que ambos llevaban rato sin verse, y que un familiar les contó que eran inseparables –porque básicamente llevan 63 años casados– prepararon una cita para ambos. De acuerdo con el propio centro de salud, Kim y Hannah armaron una cena sumamente romántica, en la que ambos pudieron platicar, abrazarse y compartir un momento juntos; eso sí, con todas las medidas de seguridad
Y la cena de Terry y Frank tiene una razón muy especial pues según el hospital, a pesar de que ambos a su edad hacen sus respectivas cosas, cuando llega la noche es el tiempo que se dedican para contar lo que sucedió en su día. Es por eso que la idea de que esta pareja compartiera una comida deliciosa y sobre todo que pasaran un buen rato después de varios días sin siquiera hablarse, era lo mejor que podían hacer por ellos.
Colleagues at HSHS St. Elizabeth’s Hospital have seen firsthand how the safety precautions and visitor guidelines have…
Publicado por HSHS St. Elizabeth’s Hospital en Sábado, 30 de enero de 2021
Por supuesto que el hospital compartió la tierna imagen de la cita de estos abuelitos, y claro que un montón de personas aplaudieron el bello que gesto que las enfermeras tuvieron con ellos. Puede que la pandemia nos traiga historias que a veces nos dan el bajón, pero leer lo que estos adultos mayores vivieron –aunque sea por unas cuantas horas– nos recuerda que en medio de una situación tan compleja, suceden cosas espectaculares.
