Y aquí nuestra querida postal navideña. Se trata del rover Curiosity, el robot que la NASA envió a Marte para tomar diversos registros del planeta rojo, pero que también nos ha deleitado que con la rata de Marte, que el gorila, que la mujer marciano, y hasta se le adjudica la muerte de un lindo gatito extraterrestre.
En fin… en su recorrido, Curiosity se detuvo por un momento en la duna Namib para mandarnos una linda selfie con un fondo panorámico espectacular del Monte Sharp. Indudablemente se la anda pasando a todo dar en sus vacaciones.
Resulta que la fotografía es el primer registro de la cámara de alta calidad Mastcam. Anteriormente sólo se había ocupado las cámara MAHLI, montada en el brazo robótico de 2 metros de largo, y Nav Cam, con la cual había tomado fotos en blanco y negro.
El motivo de que se haya utilizado por primera vez la cámara Mastcam fue para poder asegurar que el funcionamiento del robot sigue siendo óptimo y ver el estado de su cubierta (por ello la selfie), ya que tras su recorrido el polvo y demás componentes amenazan su funcionamiento, el cual afortunadamente aún no se ve perjudicado. En la fotografía podemos ver la puerta a los laboratorios de química que el robot aloja en su interior.
Esta selfie fue tomada el 19 de diciembre, Curiosity llegó a las mediaciones de la duna de Namib a principios de este mes, y con esta imagen también se están percibiendo paisajes y lugares jamás antes explorados.
Es increíble poder imaginar que mientras nosotros realizamos nuestras actividades diarias, Curiosity anda deambulando en solitario en el planeta rojo, esperando alguna sorpresa tanto para él como para nosotros.
